MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado este miércoles que, al parecer, se han dado casos en los que soldados sirios situados en la frontera con Jordania han "disparado indiscriminadamente" contra cualquier persona, incluidos mujeres y niños y personas heridas, que intentan salir de Siria.
HRW ha reclamado a las autoridades sirias que "ordenen inmediatamente" a los militares desplegados en la frontera que pongan fin a esos ataques y "tomen todas las medidas posibles para evitar que resulten heridos los civiles que se marchan a países vecinos" y respeten su derecho a hacerlo.
A mediados de este mes de junio, la organización habló en Jordania con 17 refugiados sirios que contaron que al cruzar la frontera en mayo o junio en grupos de hasta 200 civiles acompañados por miembros del Ejército Libre Sirio (ELS los opositores armados que quieren derrocar al Gobierno del presidente Bashar al Assad), unos militares sirios dispararon contra ellos con armas de fuego. Tres civiles murieron y once resultaron heridos.
Todos los refugiados describieron incidentes en los que las fuerzas leales a Al Assad dispararon sin previo aviso contra "cualquier persona que estuviese cruzando la frontera", ya fuesen combatientes del ELS o civiles.
Gerry Simpson, que investiga en HRW sobre temas relacionados con refugiados, ha denunciado la contradicción en la que incurre el Gobierno sirio al afirmar que "está luchando contra terroristas armados" y al mismo tiempo "disparar a cualquiera que cruza la frontera, sin distinción".
Al atacar "indiscriminadamente" a los civiles, está violando "el derecho a la vida, el derecho a salir del propio país y el derecho a pedir asilo en otro país", ha concluido.
RECIBEN LA ORDEN DE DISPARAR
Un militar que desertó de las Fuerzas Armadas sirias aseguró que otros desertores presentes en la frontera entre Jordania y Siria le contaron que habían recibido la orden de disparar a cualquier persona que intentase salir o entrar a Siria sin pasar por un puesto fronterizo oficial, y que algunos soldados se negaron a obedecer la orden.
HRW también ha hablado con civiles refugiados que fueron atacados por militares sirios al cruzar la frontera con Irak. La ONG Refugees International y varias informaciones de medios de comunicación indican que este tipo de incidentes han ocurrido también en el límite entre Siria y Líbano.
De los 21 refugiados sirios que fueron entrevistados por HRW en Jordania, solo cuatro dijeron que sus grupos no fueron objeto de disparos al salir de Siria. También afirmaron que habían sido testigos o les habían contado que el Ejército sirio había matado a tres civiles y herido a otros once (incluida una mujer embarazada) y detenido a unos 170 civiles, entre ellos más de cien mujeres y niños cuya situación actual se desconoce.
EL ELS NO SUELE RESPONDER A LOS ATAQUES
Según los relatos de los refugiados, generalmente los miembros del ELS no respondían con disparos a los ataques de las fuerzas gubernamentales sirias para evitar que se desencadenase un enfrentamiento en el que se viesen atrapados los civiles. Disparaban solo cuando los militares se acercaban demasiado, y en esos casos muchos refugiados tenían que arrastrarse o correr tan rápido como podían para llegar a territorio jordano.
Una vez allí, recibían inmediatamente la ayuda de militares jordanos. Desde que comenzaron las protestas contra el régimen sirio, en marzo de 2011, más de 26.000 sirios se han registrado como refugiados en Jordania.
Simpson ha señalado que el hecho de que el Gobierno sirio esté "obligando a civiles desesperados a salir a rastras de su país bajo una lluvia de balas" demuestra que no está cumpliendo su deber de "proteger a sus ciudadanos".
Muchos refugiados han afirmado que los guardias sirios presentes en el puesto de Naseeb-Jader --el único puesto fronterizo oficial en la frontera entre Siria y Jordania que está abierto en teoría para cualquier persona que desee entrar o salir del país-- les impidieron el paso a ellos o a sus familiares sin ningún motivo. Otras familias lograron salir de Siria sobornando a los guardias.
HRW ha subrayado que aunque los civiles estén acompañados por combatientes del ELS que participan en enfrentamientos, el Ejército sirio "debe tomar todas las medidas posibles para minimizar el daño que sufren los civiles, asegurándose de que solo ataca objetivos militares". Igualmente, los rebeldes deben evitar que los civiles mueran o resulten heridos "asegurándose de que su presencia no provoca ataques contra los civiles", ha añadido.
