BELGRADO, 22 Jul. (Reuters/EP) -
Cientos de inmigrantes de Oriente Próximo y Asia se han manifestado este viernes en Belgrado de camino a Hungría y han anunciado el inicio de una huelga de hambre para solicitar un salvoconducto hacia el centro de Europa.
El mes pasado, Hungría aprobó una ley que permite devoluciones en caliente de inmigrantes detenidos en un radio de hasta ocho kilómetros de la valla de alambre de espino que marca la frontera con Serbia. El país también ha reducido el número de entradas diarias a 30 personas.
Este viernes, un grupo de unos 300 hombres, en su mayoría de Afganistán, Pakistán e Irán, han iniciado una marcha en Belgrado hacia la frontera con Hungría, localizada 200 kilómetros al norte. El grupo también ha anunciado una huelga de hambre.
Para hacer frente a la afluencia de más de 100.000 inmigrantes que han pasado a través de Serbia en lo que va de año, la Policía y Ejército del país han formado patrullas conjuntas en las fronteras. Más de 650.000 personas pasaron por Serbia el año pasado para llegar a la Unión Europea.
El ministro de Asuntos Sociales serbio, Aleksandar Vulin, ha asegurado este viernes que actualmente hay en el país unos 3.000 inmigrantes. "Serbia no se lo puede permitir", ha dicho y ha acusado a los países europeos de no encontrar una solución.
A diferencia de en 2015, cuando los países intentaron organizar las travesías de los inmigrantes, el cierre de la ruta balcánica ha llevado a muchos a cruzar las fronteras de manera ilegal y a ponerse a merced de redes de tráfico de seres humanos.
