WASHINGTON (EP/AP), 18
El secretario de Defensa estadounidense Donald Rumsfeld no pudo prometer ayer miércoles en una rueda de prensa, una retirada significativa de las tropas americanas en Irak a final de año a pesar de que deseaba que tal cosa pudiera suceder.
"No. Nadie puede prometerlo", afirmó Rumsfeld a un comité del Senado en relación al abandono de las tropas. "Sin embargo, es nuestro deseo, el deseo de nuestros soldados y el deseo del pueblo iraquí".
Junto a Rumsfeld se encontraba el jefe del Estado Mayor Conjunto, el general Peter Pace , que confirmó que no podría tener lugar una retirada completa de ninguna de las 18 provincias donde se encuentran desplazados los efectivos.
Tanto los representantes demócratas y republicanos piden el regreso de las tropas a casa, mientras las últimas encuestas reflejan que los miembros del Senado y del Congreso han dejado de apoyar la guerra en Irak tras el aumento de costes y bajas humanas.
Más de 2.400 soldados americanos han muerto en Irak, en una guerra en la que Estados Unidos lleva gastados más de 200.000 millones de euros
