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REUTERS
Actualizado: miércoles, 5 octubre 2016 16:01

BERLÍN, 5 Oct. (Reuters/EP) -

La canciller de Alemania, Angela Merkel, ha manifestado este miércoles que, a pesar de que su aperturista política de inmigración ha provocado una nueva oleada de críticas y desaprobación por parte de los opositores más conservadores del Gobierno alemán, no piensa realizar cambios al respecto.

Merkel decidió en 2015 permitir la llegada al país de unos 900.000 refugiados, la mayoría musulmanes, lo que ha provocado un descenso de la popularidad de la canciller ante la preocupación de los alemanes por la integración en el país.

La jefa del Ejecutivo ha señalado durante una entrevista para el diario 'Die Zeit' que las críticas han aumentado significativamente durante el último año. "La confrontación en las redes sociales es aún mayor, así es la democracia de hoy", ha indicado la canciller, que ha añadido que la desaprobación no impedirá que continúe explicándole a la población en qué consiste su política.

"Las medidas puestas en marcha están continuamente en proceso de cambio, pero la base de todas ellas se ha mantenido constante durante este tiempo", ha aseverado. Merkel ha centrado su política migratoria en ayudar a aquellas personas que huyen de la guerra o el terrorismo, así como en rechazar el tráfico de personas.

Después de haber perdido dos elecciones a nivel regional en septiembre, Merkel ha manifestado que desearía poder volver atrás para preparar mejor el país ante la llegada de un gran número de refugiados.

"Si hablo de errores me refiero a todo el sistema y a todas las leyes de inmigración y refugiados de la Unión Europea, a cómo se han comportado los diferentes países con los inmigrantes y refugiados durante muchos años", ha zanjado.

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