MADRID, 8 Nov. (EUROPA PRESS) -
Miles de personas han salido este viernes a las calles de la capital de Yemen, Saná, para mostrar su apoyo al expresidente Alí Abdulá Salé y los dos líderes rebeldes houthi que han sido sancionados por Naciones Unidas por su responsabilidad en la crisis política que atraviesa el país.
La protesta, que ha tenido lugar con anterioridad a la aprobación definitiva de las sanciones, que incluyen la prohibición global de viajar y la congelación de activos, ha puesto de manifiesto el apoyo que recibe Salé, al que se responsabiliza de la crisis yemení y al que se le acusa de respaldar a los rebeldes houthis.
De hecho, el portal 'Al Arabiya' publicó un artículo en el que aseguraba que Salé estaba ayudando "de forma activa" a los rebeldes a hacerse con el control del pais como parte de su plan "para volver al poder". En él, se aseguraba que Salé había mantenido un encuentro "secreto" con líderes houthi.
Finalmente, los quince miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas han acordado introducir en la lista negra a Salé y a los líderes rebeldes Abd al Khaliq al Huthi y Abdulá Yahya al Hakim.
