La Policía tailandesa propone una amnistía para los 'camisas rojas'

BANGKOK, 14 Jun. (Reuters/EP) -

El Departamento de Investigación Especial (DSI) de la Policía tailandesa ha propuesto una amnistía para los manifestantes del movimiento opositor de los 'camisas rojas' que violaron el estado de excepción durante los recientes disturbios políticos en Bangkok, pero ha advertido de que esta amnistía no sería extensible "a terroristas, milicianos ni pirómanos".

La propuesta, que se produce tras el llamamiento a la reconciliación del Gobierno, ha generado cierta controversia. El Ejecutivo ha expresado sus reservas y ha advertido de que, de momento, no ha sido presentada de forma oficial.

La amnistía "favorecería a las miles de personas que violaron el estado de excepción únicamente para protestar, incluso a las que tomaron fotografías exclusivamente por diversión", declaró este lunes el jefe del DSI, Tharit Pengdit. "Por supuesto, no estamos hablando de dejar escapar a los terroristas, milicianos o pirómanos", agregó.

Por su parte, el viceprimer ministro, Suthep Thaugsuban, ha expresado su reservas a la iniciativa y ha advertido de que la amnistía aún no ha sido propuesta de forma oficial. "Algunos han expresado su preocupación porque complicaría la actuación de las fuerzas del orden en el futuro", explicó ante la prensa. "Vamos a considerar la opinión pública de todas las partes", agregó.

Un total de 89 personas murieron y alrededor de 2.000 resultaron heridas en la reciente oleada de violencia en el país. Las manifestaciones comenzaron a mediados de marzo, cuando alrededor de 10.000 personas reclamaron la destitución del primer ministro, Abhisit Vejajiva, y la convocatoria de elecciones anticipadas.

A principios de abril, los 'camisas rojas' ocuparon el corazón comercial de Bangkok y, tras varios intentos de negociación, el Gobierno ordenó una ofensiva militar contra el campamento de los opositores que concluyó el 19 de mayo, en medio de incendios y enfrentamientos armados.

Los 'camisas rojas' tienen sus principales apoyos entre la población rural y los sectores más pobres de las ciudades, así como entre los partidarios del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, derrocado en septiembre de 2006 mediante un golpe de Estado militar y actualmente exiliado, después de que un tribunal del país lo declarara culpable de corrupción.