BULEUSA (REPÚBLICA DEMOCRÁTICA DEL CONGO), 31 May. (Reuters/EP) -
Los rebeldes ruandeses de la República Democrática del Congo han dado este viernes el primer paso para desarmar a sus combatientes, aunque han advertido de que la continuidad de este proceso dependerá de que el Gobierno participe en conversaciones.
Las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) aseguraron hace un mes que dejarían la lucha armada y se dedicarían a participar en la "lucha política".
Un centenar de combatientes han puesto de manifiesto su rendición durante una ceremonia en la provincia de Kivu MNorte, entregando varias armas y artillería pesada.
"Con este acto de buena fe se hace un llamamiento a la comunidad internacional para que asuma su responsabilidad en obtener un diálogo político entre los ruandeses", ha afirmado el presidente de las FDLR, Victor Byringiro.
A la ceremonia han asistido representantes de la misión de Naciones Unidas en República Democrática del Congo (MONUSCO), la Comunidad de Desarrollo del África Austral (SADC) y la Conferencia Internacional de la Región de los Grandes Lagos.
Estas fuerzas están compuestas en su mayor parte por antiguos rebeldes y milicias hutu que huyeron hacia el Congo después de la masacre de unos 800.000 tytsis y hutus moderados en el genocidio de Ruanda de 1994. Desde entonces, las FDLR ha intentado derrocar el Gobierno presidido por Paul Kagame.
Además, las FDLR han sido acusadas en numerosas ocasiones de cometer abusos contra los Derechos Humanos, entre las que se incluyen masacres de civiles. Esta semana Naciones Unidas ha acusado a estas milicias de quemar varias casas y escuelas del distrito de Walikale.
Las autoridades ruandesas han mostrado en varias ocasiones su rechazo a la posibilidad de negociar con las FDLR, que Kigali considera una organización terrorista que defiende el genocidio.
En este sentido, el portavoz del Gobierno congoleño, Lambert Mende, ha subrayado que "no habrá negociaciones con las FDLR". "Han ofrecido rendirse y veremos si este proceso es efectivo", ha afirmado.
"Esperamos que los comandantes se unan a este proceso --de desmovilización-- y no sólo los milicianos, ya que tenemos la orden de neutralizar los grupos armados y queremos ver el fin de las FDLR en el Congo", ha afirmado un cargo de la MONUSCO en condición de anonimato.
