ROMA, 22 Dic. (EUROPA PRESS/ Gloria Moreno) -
El primer ministro de Italia, Silvio Berlusconi, telefoneó la mañana de este martes al presidente de la República, Giorgio Napolitano, para felicitarle la Navidad y apreciar el discurso que pronunció este lunes ante las altas instituciones del Estado. El acercamiento entre el primer ministro y el presidente se produce al término de un trimestre marcado por el enfrentamiento entre los distintos poderes del Estado y unos días después de que un hombre agrediera a Berlusconi en Milán.
Napolitano hizo referencia este lunes a la "brutal agresión" de la que fue víctima el primer ministro la semana pasada e invitó a todos los partidos políticos y a la ciudadanía en general a reflexionar sobre lo sucedido.
Las palabras de Napolitano gustaron a Berlusconi, que la mañana de este martes le llamó para darle las gracias. "Me ha gustado que me haya llamado y haya apreciado las líneas generales de mi discurso", explicó Napolitano a los periodistas en referencia al gesto de Berlusconi.
Con todo, parece que la agresión sufrida por el primer ministro ha servido para aminorar la tensión que le separaba del presidente de la República. Las relaciones entre ambos se habían deteriorado a raíz de las críticas abiertas que Berlusconi dirigió contra Napolitano a raíz de la derogación de la ley de inmunidad que le protegía de la Justicia.
En particular, Berlusconi había puesto en duda la imparcialidad política de Napolitano a la hora de elegir a los magistrados que componen el Tribunal Constitucional, que es el mismo que se pronunció contra la ley de inmunidad.
Las claras acusaciones de Berlusconi contra la magistratura y contra el mismo presidente de la República abrieron una crisis institucional y favorecieron el clima de crispación que ha caracterizado la política italiana en estos últimos meses.
