Moratinos y Rubalcaba insistirán en que el salvamento o la identificación de inmigrantes también pueden ser asumidos por la UE
MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
España planteará hoy a sus socios mediterráneos de la Unión Europea --Francia, Italia, Portugal, Grecia, Eslovenia, Chipre y Malta-- que se impulse la creación de una policía de fronteras y un servicio de guardacostas a nivel europeo, según informaron fuentes gubernamentales ante la cita ministerial de hoy en Madrid que reunirá a los titulares de Exteriores e Interior de estos ocho países.
Esta reunión busca elaborar una propuesta conjunta sobre inmigración ilegal y control de fronteras en el sur de Europa para su evaluación en la reunión de ministros de Interior y Justicia de la UE del próximo 4 de octubre y su eventual aprobación en la Cumbre europea de jefes de Estado y de Gobierno en Lathi (Finlandia) el 20 de octubre.
Uno de los objetivos de España es subrayar la necesidad de que haya un sistema "rápido, eficaz y eficiente" en el control de las fronteras marítimas del sur y que vaya más allá del actual dispositivo que tiene puesto en marcha la Agencia Europea de Control de Fronteras (FRONTEX) en aguas próximas a las Islas Canarias.
"España quiere sensibilizar (al resto de socios europeos) de que el problema de la inmigración ilegal es un problema común" y que el "único modelo válido" para luchar contra este fenómeno es que haya una respuesta a nivel europeo, indicaron.
Para ello la delegación española, encabezada por los ministros Miguel Ángel Moratinos y Alfredo Pérez Rubalcaba, presentará varias propuestas para "reforzar" FRONTEX, "agilizar" sus mecanismos de actuación una vez que esta agencia de reciente creación dispondrá de 287 millones de euros durante el período 2007-2013. La previsión de Bruselas es que FRONTEX cuente el próximo año con 22 millones de euros --para este año se presupuestaron 1,5 millones-- y que su equipo de funcionarios se incremente a 85 personas en 2007.
Las mismas fuentes recordaron que la citada agencia es "un bebé" y que los medios de actuación están en manos de los Estados miembros, por lo que FRONTEX debe trabajar en la coordinación de eventuales despliegues. Además, España descarta por el momento solicitar al resto de socios que asuman una parte proporcional de los inmigrantes indocumentados que llegan a territorio español a semejanza de lo que se hace ahora entre las Comunidades Autónomas.
"Es impensable un reparto de inmigrantes ilegales entre los Veinticinco. La política que llevan a cabo los países europeos es de retorno de estos inmigrantes a sus países de origen", subrayaron. En la actualidad hay entre 7 y 12 millones de extranjeros indocumentados dentro de la UE, es decir, una cifra "muy próxima" a la que existe en Estados Unidos.
TAREAS DE SALVAMENTO O IDENTIFICACIÓN
El Gobierno español ha insistido en las últimas semanas en que hay tareas como el salvamento o la identificación de inmigrantes, así como toda una serie de cuestiones, que tienen que abordarse para que los países mediterráneos tengan mayor capacidad a la hora de que los Veinticinco asuman la inmigración como un reto global.
Se quiere así tener un marco de actuación para evitar conflictos como el ocurrido recientemente cuando el pesquero español 'Francisco y Catalina' rescató de las aguas libias a un grupo de inmigrantes que fueron luego traslados a Malta para, desde allí, ser repartidos por varios países de la UE.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa de la Vega, anunció el pasado miércoles en el pleno del Congreso que, a día de hoy, las autoridades españolas han repatriado a un total de 72.000 inmigrantes irregulares, de los cuales 15.000 lo han sido al África subsahariana.
En este sentido, una patrullera de la Armada mauritana, integrada por gendarmes de ese país y guardias civiles, interceptó el miércoles un cayuco con 114 inmigrantes en aguas del país africano, informaron a Europa Press fuentes próximas al dispositivo. El cayuco fue divisado a la altura de Cabo Blanco, puerto al que fue conducido por la patrullera y donde ya se encuentran los inmigrantes.
La patrullera que interceptó el cayuco forma parte del dispositivo de FRONTEX que vigila las aguas de Mauritania y Senegal en busca de embarcaciones que pretenden alcanzar Canarias de forma irregular. El cayuco pudo haber salido de algún punto de Gambia, según las fuentes consultadas.
Asimismo, explicaron que desde que se puso en marcha este dispositivo, el número de embarcaciones interceptadas supera el medio centenar. Alrededor de 2.300 inmigrantes viajaban en esos cayucos. En cuanto a la labor hecha en tierra, Mauritania y Sengal han evitado la salida de más de 10.000 irregulares rumbo a Canarias en las últimas semanas y han desarticulado más de 25 redes mafiosas que traficaban con estos subsaharianos.
CARTA DE ZAPATERO Y SIETE HOMÓLOGOS A BARROSO
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, junto con otros siete jefes de Estado y de Gobierno del sur de Europa, enviaron el pasado lunes una carta al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, al que pidieron "propuestas concretas" en materia de inmigración, al tiempo que reclamaron la "movilización" europea para hacer frente a este problema que, recuerdan, "afecta al conjunto de la Unión".
En la misiva, que suscribieron entre otros el presidente francés, Jacques Chirac, y el presidente del Gobierno italiano, Romano Prodi, los dirigentes europeos subrayan que "la urgencia del problema de la inmigración ilegal en el Mediterráneo y en el sur de Europa exige una fuerte movilización de la Unión Europea y un compromiso conjunto por parte de los países de origen, de tránsito y de destino de los inmigrantes".
Los ocho mandatarios hicieron toda una serie de propuestas y consideraron indispensable "reforzar la cooperación operativa en la gestión de la frontera marítima meridional de la UE", teniendo en cuenta "las especiales características de esta frontera marítima en aspectos tales como las funciones de patrulla y vigilancia marítima, las obligaciones de salvamento y de acogida, y las labores de identificación y retorno de los inmigrantes clandestinos".
Según ellos, "a la luz de los recientes acontecimientos", en alusión a la masiva llegada de inmigrantes a Canarias, consideran "fundamental" el "mejorar la organización de operaciones conjuntas con el reforzamiento de las capacidades operativas, administrativas y financieras de FRONTEX y obtener la mayor implicación de los Estados miembros". "Cada uno debe aportar su contribución a la lucha contra la inmigración clandestina, que afecta al conjunto de la Unión y no solamente a los países que guardan sus fronteras exteriores", reclamaron los ocho mandatarios.
ACUERDOS DE READMISION
Además, estimaron "esencial" la aplicación de los "compromisos adquiridos en la Conferencia de Rabat y explorar la posibilidad de promover iniciativas análogas en otras rutas migratorias", así como la "preparación de la Conferencia Unión Europea-Africa de Trípoli" y "promover, en el marco de un diálogo global sobre las migraciones con los Estados africanos y mediterráneos, la conclusión rápida de acuerdos de readmisión y la buena aplicación de los acuerdos ya adoptados". También hay que "adaptar la ayuda financiera de la Comunidad (UE) a los países terceros en el ámbito migratorio".
En todo caso, reconocieron que es necesario "sobre todo contar con una voluntad política clara para realizar lo que se ha decidido de común acuerdo y para desarrollar nuevas iniciativas", que son desde este momento indispensables a causa de la reciente afluencia de inmigrantes en las fronteras meridionales de la Unión Europea".
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