Hormiga recuerda que quedan pocos días para saber si los turistas británicos van a poder volver a Canarias
PUERTO DEL ROSARIO (FUERTEVENTURA), 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
La patronal turística de Fuerteventura, Asofuer, ha tachado este martes de "aberración" que el Gobierno de España aloje en hoteles de la isla a migrantes llegados en los últimos días en pateras o cayucos.
Así lo ha puesto de manifiesto la agrupación empresarial en un comunicado tras conocer la decisión del Estado de trasladar este martes a los migrantes de la conocida como Nave del Queso, en Puerto del Rosario, a un establecimiento hotelero céntrico de Caleta de Fuste, en el municipio turístico de Antigua.
Por ello, el presidente de Asofuer, Antonio Hormiga, ha acusado al Ejecutivo central de "atacar" al sector turístico con esta decisión, al tiempo que recordó que hace meses ya se pronunció con rotundidad sobre la cuestión alojativa aseverando que es una "auténtica aberración" y un "golpe durísimo a la imagen de destino seguro y de calidad que se quiere proyectar".
"Consternado" tras conocer la noticia esta mañana, el dirigente de la patronal ha mostrado su "perplejidad" ante la decisión y ha alertado de que la improvisación en materia migratoria "puede llevar a la pérdida de innumerables puestos de trabajo en el sector turístico".
"El sector empresarial de las islas --continuó Hormiga-- no puede ni debe resolver la papeleta a un Gobierno que ha abandonado a Canarias en materia de inmigración".
La patronal ha instado al sector empresarial a evitar este tipo de actuaciones y se ha puesto a disposición del Ayuntamiento de Antigua y de la Asociación de Empresarios de El Castillo (AECA) para "sumar esfuerzos en las iniciativas que se pueden impulsar a fin de evitar esta sinrazón".
"Quedan pocos días para conocer si, por fin, los turistas británicos van a volver a la Isla, y a Caleta de Fuste, y no los podemos espantar con noticias de este tipo", agregó el presidente para concluir que el Gobierno no puede olvidar que el alojamiento de los migrantes en los establecimientos hoteleros "constituye un claro efecto llamada que dificulta, más si cabe, la gestión migratoria".
