MADRID, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
El informe criminológico de un despacho madrileña ha abierto nuevas líneas de investigación dirigidas al esclarecimiento de la muerte de Déborah Fernández, la joven que apareció muerta en abril de 2002 en una cuneta de Vigo desnuda, colocada de forma cuidadosa y tapada por ramas.
Cuando apenas quedan ocho meses para que prescriba este crimen, el letrado de la familia, Ramón Pérez Amoedo, se ha apoyado en un informe profesional muy detallado elaborado por los criminólogos madrileña del despacho Balfagón & Chippirrás, para solicitar nuevas diligencias.
En estos ochos meses, tanto letrado como familia quieren agotar todas las vías para intentar resolver el caso. En este sentido, el informe elaborado plantea la necesidad de realizar pruebas de AND a más de una treintena de personas, "toda vez que las pruebas de AND realizadas en estos casi veinte años, son pruebas consideradas nulas, por estos profesionales, puesto que se hicieron con un cotejo equivocado".
Por otra parte, en dicho informe se plantean líneas de investigación que, "de manera inexplicable" para estos criminólogos, no fueron agotadas por la Policía, así como otras líneas que no fueron ni planteadas por los investigadores, tal y como se desprende del sumario.
Según Carmen Balfagón, criminóloga y abogada de B&CH, "es incomprensible que se hayan perdido casi veinte años en el esclarecimiento de un homicidio como el de Déborah, con diligencias absurdas por parte de los investigadores que, como se ha visto hasta el momento actual, no han llevado a aclarar quien fue el autor u autores de la muerte de Déborah, y como murió".
"Sabemos que las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, cuentan con magníficos profesionales, por lo que no alcanzamos a entender que es lo que ocurre con el caso de Déborah, caso con tan poco impulso en la investigación", ha añadido a Europa Press Ramón Chippirrás, criminólogo y cofundador de dicho despacho.
Además, desde Balfagón & Chippirrás quieren dejar patente "la importancia del papel del criminólogo en una sociedad moderna como la nuestra, y como complemento necesario a la labor que realizan otros profesionales". "Estos ocho meses son decisivos para que Déborah consiga la justicia que se merece", recalcan.
