MADRID, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Hasta 423 proyectos --271 de ellos finalizados, 75 en ejecución y 57 en tramitación-- ponen su granito de arena desde 2016 para limar las heridas entre los barrios de Madrid a través del Fondo de Reequilibrio Territorial (FRT), dotado con un presupuesto global de 166 millones, con un impacto estimado sobre una población de 1,7 millones de personas y un beneficio directo sobre 261.000 personas.
Pero el FRT no puede ser un listado frío de datos. "Lo que la gente ve son hechos, no cifras", decía el delegado de Coordinación Territorial y Cooperación Público-Social, Nacho Murgui, en la última comisión de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto.
El FRT son las orquestas escolares en los colegios públicos de Retiro, el equipamiento dotacional que dará vida al solar del que fuera el antiguo mercado de Puerta Bonita, en Carabanchel, la biblioteca de Villaverde o la retirada de amianto en la Meseta de Orcasitas.
También han sido financiados con cargo al FRT los campos con hierba artificial de Los Cármenes (Latina) y de la avenida de Guadalajara (San Blas); la rehabilitación de 38 instalaciones deportivas básicas en barrios y distritos vulnerables; la remodelación de plazas, auténticas señas de identidad, como la de Arturo Barea (Centro) o el Bulevar Peña Gorbea (Puente Vallecas); la rehabilitación de casi una treintena de colegios públicos, en San Blas, Moratalaz y Villaverde principalmente; la escuela infantil de Moscardó (Usera); los Espacios de Igualdad en Hortaleza y Retiro; el Centro Sociocomunitario en Cañada Real o la rehabilitación de la iglesia de Maris Stella (Usera) para construir un centro de interpretación ambiental en el parque de Pradolongo.
Pero sigue el suma y sigue del FRT, con los 85 talleres de formación de empleo. Son el Vallecas Labora en Puente y Villa de Vallecas, Carabanchel Arganzuela, Latina, Usera, Moratalaz, San Blas... Han ofrecido formación y trabajo a más de mil personas desempleadas. El FRT también está detrás de los quince Equipos de Actuación Distrital o de los 35 Planes Integrales de Barrio.
Con el Fondo se realizan intervenciones en los distritos que más lo necesitan bajo los principios de corresponsabilidad y solidaridad territorial y conforme al índice de vulnerabilidad que los clasifica según sus necesidades y carencias. Por ejes, el Fondo se reparte entre dotaciones, mejoras urbanas, empleo e intervención social.
EJECUCIÓN DEL FRT DEL 76,81% Y FOCO EN EL SUR Y EN EL ESTE
El porcentaje de ejecución del Fondo es del 76,81 por ciento, como indicó Murgui en la última comisión. El 66 por ciento de su presupuesto
ha ido a parar a los distritos del sur y del este de Madrid, los más desfavorecidos.
Para el ejercicio 2019 la dotación ha aumentado un 40 por ciento respecto al año anterior, con 54,9 millones de euros para continuar con proyectos existentes e iniciar nuevas actuaciones. Por tanto, en el periodo 2016-2019 el FRT tendrá una dotación total de 166,3 millones de euros.
VALORACIÓN POSITIVA
La valoración que hace Nacho Murgui del Fondo de Reequilibrio Territorial es positiva con los datos en la mano aunque remarca que no es posible valorar todavía el impacto que ha tenido en el desequilibrio territorial por el corto tiempo que ha pasado desde la ejecución de las inversiones, insuficiente para dar la vuelta a décadas de desigualdades.
"Pero los resultados obtenidos hasta ahora nos animan a seguir profundizando en la lucha contra la desigualdad territorial con proyectos más ambiciosos en los que se deben involucrar todas las administraciones", apuntaba el concejal.
En esta línea se enmarca la creación de la Oficina del Sur y Este, en la que están participando las entidades y colectivos de los nueve distritos más desfavorecidos (Puente y Villa de Vallecas, Usera, Villaverde, Latina, Carabanchel, San Blas-Canillejas, Vicálvaro y Moratalaz), además de los grupos políticos municipales, representantes del sector empresarial, de los sindicatos, de las universidades y el Gobierno de la Nación y la Comunidad de Madrid.
MODELO PARA DISTRIBUIR EL FRT
Para distribuir el Fondo de Reequilibrio Territorial se analizan los barrios de Madrid a partir de cinco dimensiones (población, estatus socioeconómico, actividad económica, desarrollo urbano y necesidades asistenciales), cada una con un determinado peso, a lo que se unen trece indicadores.
Aquí es donde entra el empleo del modelo matemático elaborado por la Universidad Carlos III dado que en el Ayuntamiento entienden que la vulnerabilidad no puede entenderse ni combatirse exclusivamente desde el punto de vista del nivel de ingresos por ser un fenómeno de múltiples dimensiones.
