MADRID, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, condenó hoy el atentado "vil y despreciable" que anoche causó importantes daños en la Casa del Pueblo de Durango, en Vizcaya, y aseguró que los terroristas, "más allá del susto" provocado, "no quebrarán la voluntad de paz, de convivencia y prosperidad de la mayoría de los vascos".
De la Vega comenzó la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros trasladando "todo el apoyo del Gobierno de España" al Ejecutivo vasco y toda su "solidaridad a los socialistas de Euskadi y a la inmensa mayoría de la sociedad vasca que hace ya mucho tiempo ha dado la espalda a los violentos".
Tras señalar que "todo apunta" a que la explosión del artefacto, con tres kilos de explosivo, lleva "la firma de ETA", la vicepresidenta destacó que fue la "colaboración ciudadana" la que permitió que esta "acción vil y despreciable" no haya provocado daños personales.
Asimismo, la portavoz del Gobierno aseguró que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "ya están siguiendo el rastro a estos violentos" y garantizó que "serán detenidos y sentados en el banquillo para que salden sus cuentas pendientes en la cárcel".
