El fin de la instrucción del caso 'Dina', pendiente de lo que decida la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional

MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -

El juez de la Audiencia Nacional que instruye la pieza separada número 10 --'Dina'-- del caso Tándem ha elevado a la Sección tercera de la Sala de lo Penal los recursos de apelación de las diferentes partes --tanto acusaciones como defensas-- contra el auto que daba por finalizada la instrucción para que resuelva sobre el mismo.

En cinco diligencias de ordenación del Letrado de la Administración de Justicia, a las que ha tenido acceso Europa Press, se indica que dado el estado de las presentes actuaciones y con el fin de sustanciar dichos recursos se deben remitir a la Sala de lo Penal para que decida. Este paso se produce siete meses después de que el magistrado titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Manuel García-Castellón, acordara procesar tanto al comisario José Manuel Villarejo como a su socio y a los dos periodistas investigados en la causa.

Fuentes del caso indica que resulta llamativo que esta diligencia, que comprende recursos tanto de Fiscalía, de Villarejo, de los periodistas, del exlíder de Podemos Pablo Iglesias o de la propia exasesora 'morada' Dina Bousselham, se produzca tan tarde ya que todos fueron presentados a los pocos días de conocerse la resolución del magistrado. De hecho, apuntan que es un claro caso de dilación indebida.

Cabe recordar que García-Castellón resolvió finalizar la fase de investigación de la causa el 7 de octubre de 2020 y propuso juzgar a Villarejo, al exdirector de Interviú Alberto Pozas y al subdirector de esa misma publicación Luis Rendueles por un presunto delito de descubrimiento y revelación de secretos.

En 'Dina' se investiga el robo del móvil de la exasesora de Podemos Dina Bousselham en 2015. De hecho, el juezz en su auto de 10 páginas detallaba que la causa tiene origen en unos archivos encontrados en la entrada y registro del domicilio de Villarejo en 2017 en los que había información personal de la que fuera asesora de Iglesias así como datos sensibles del partido 'morado'.

EL ROBO DE LA TARJETA

Según explicaba, en noviembre de 2015 sustraen en el IKEA de Alcorcón el abrigo de la pareja de Bousselham --Ricardo Antonio Sa Ferreira-- en cuyo interior había varios objetos entre los que se encontraba el teléfono móvil de la asesora.

Justo dos años más tarde de ese robo, en noviembre de 2017, aparecen en el domicilio de Villarejo un disco duro y dos memorias USB en los que se almacenan unas carpetas denominadas DINA 2 y DINA 3, que contenían archivos procedentes de la tarjeta de memoria mini SD del móvil sustraído a Bousselham.

Y apuntaba el juez en el auto que los archivos de uno de los pendrives fueron copiados el 14 de abril de 2016 mientras que los del disco duro son copia del pendrive realizada en julio de 2016. Sobre cómo llegó a manos de Villarejo esa información, el magistrado indicaba que se sabe que el contenido de la tarjeta de Bousselham llegó a Pozas, que en aquel momento era director de Interviú, quien se guardó una copia en su ordenador.

Éste, a su vez, "comparte los archivos y gran parte de información que contiene la tarjeta con el subdirector de la revista, Luis Rendueles" y posteriormente la SD es estregada al presidente del Grupo Zeta Antonio Asensio.

En 2016, antes de abril, Villarejo contacta con Rendueles y le pide que le entregue una copia de los archivos de Bousselham. Según explica el magistrado en el auto, Rendueles lo habla con Pozas, y este "pese a saber que la tarjeta contenía una información personal ajena a Villarejo, accede a la petición". Ambos se vieron con el comisario y le facilitaron parte del contenido.

Por este motivo, García-Castellón entiende que esos hechos pueden ser constitutivos de un delito de descubrimiento y revelación de secretos. Y añade que la imputación de los tres se basa en los indicios, en la "extensa y abundante documentación que obra en la causa y en las declaraciones de testigos e investigados".

LA EXPOSICIÓN RAZONADA

Cabe recordar que el mismo día en el que daba por finalizada la instrucción, el juez elevaba una exposición razonada en al que solicitaba al Supremo que investigara al entonces vicepresidente segundo del Gobierno por los delitos de descubrimiento y revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos y acusación o denuncia falsa y/o simulación del delito en relación a la 'pieza Dina'.

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo acordó en enero de este año devolver a García-Castellón las actuaciones que remitió a este órgano contra Iglesias, para que agotara la investigación, y una vez realizadas las nuevas diligencias, decidiera si procede remitir una nueva exposición razonada contra él. Algo que ya no sería necesario porque ya no es aforado.

De momento, el juez está pendiente de un informe policial que analizará de nuevo la tarjeta SD de Bousselham, y una vez cuente con él sopesará si procede imputar al que fuera líder de Podemos, que continúa siendo perjudicado en esta causa, o si por el contrario no emprende ningún tipo de acción.