Los grandes partidos vascos ya han mantenido contactos informales

BILBAO, 29 May. (EUROPA PRESS) -

Los grandes partidos vascos ya han mantenido contactos informales para sopesar las fórmulas de gobierno que se pueden conformar en la Comunidad Autónoma Vasca tras las elecciones municipales y forales desarrolladas el pasado 22 de mayo. Precisamente, Bildu comienza este lunes su ronda de contactos en Guipúzcoa, territorio determinante a la hora de establecer pactos y que condicionará otros posibles acuerdos en ayuntamientos y otras diputaciones.

Según informaron a Europa Press fuentes de las diferentes formaciones, los grandes partidos vascos, PNV, PSE-EE y PP, han mantenido contactos informales para ver qué posibilidades de pactos puede haber en Euskadi, sin que se haya entrado en ninguna concreción. También con Bildu ha habido intercambios de llamadas, aunque no con los populares, que se niegan a mantener relaciones con la coalición soberanista, que incluye la ronda de contactos que comenzará este lunes, a la que el PP no asistirá.

La situación más estable para conformar gobiernos es Bizkaia, donde el PNV ha sido la primera fuerza y en cuya capital, Bilbao, ha logrado la mayoría absoluta. Los jeltzales aseguran que la semana pasada ya iniciaron sus conversaciones, pendientes de extender a Guipúzcoa y Álava.

PACTO GLOBAL

El PSE-EE y el PP pretenden lograr con el PNV un acuerdo global que comprenda a todas las instituciones de Euskadi con el fin de garantizar su estabilidad y defender "los grandes proyectos estratégicos" que Bildu rechaza.

Los socialistas ya han advertido a la formación jeltzale que no accederá a establecer acuerdos puntuales, en caso de que rechace una solución global. En todo caso, será el comité nacional del PSE-EE, que se celebrará el 1 de junio, el que adoptará la determinación final y establecerá la política de alianzas.

El PP también apuesta por un acuerdo entre su partido, el PNV y el PSE-EE para toda la Comunidad Vasca, de forma que se respete en cada institución a la lista más votada de entre estas tres formaciones.

El partido dirigido por Iñigo Urkullu todavía no ha especificado cuál será la opción que elegirá y si facilitará el gobierno de Bildu en la Diputación Foral de Guipúzcoa, aunque ya ha precisado que rechaza cualquier pretensión de conformar "frentes" o de aceptar, "a priori", una exclusión de la coalición soberanista, que ha pasado el filtro judicial.

RONDA DE CONTACTOS

Por su parte, Bildu ya ha manifestado que ofrecerá su apoyo, "sin contraprestaciones ni mercadeos", al candidato a la institución foral alavesa, el jeltzale Xabier Aguirre, con el fin de impedir que el popular Javier de Andrés puede hacerse con el poder en este territorio.

En este sentido, los populares ya han advertido al PNV de que, si aceptan los votos de Bildu en Álava, donde el PP ha vencido, se constatará que existe "un pacto" entre jeltzales y la coalición soberanista.

Las incógnitas sobre alianzas podrán comenzar a despejarse esta próxima semana en la que las diferentes formaciones iniciarán ya contactos más formales de los que han mantenido hasta el momento.

RONDA DE BILDU

Bildu, como ganador en territorio guipuzcoano, liderará una ronda de contactos que comenzará este lunes, a las 10.00 horas, en la sede de EA del barrio donostiarra de Igara con los representantes del PNV, entre ellos, Markel Olano, candidato jeltzale a la reelección como diputado general. En representación de la coalición soberanista, estará Martín Garitano, al que acompañarán los junteros electos Ander Rodríguez e Iñaki Agirrezabalaga.

El martes, los dirigentes de Bildu se entrevistarán con el socialista Miguel Buen, a las 11.00 horas, y el miércoles con la portavoz de Aralar, Rebeka Ubera, a las 10 horas.

Martín Garitano explicará a los dirigentes de estas tres formaciones las "líneas maestras" de su programa y expresará su voluntad de "establecer cauces de colaboración y diálogo permanente" a lo largo de la legislatura.

La coalición soberanista espera que el PNV acceda a facilitar su gestión de la Diputación foral, aunque sea en minoría, ya que tampoco quiere "rebajar" el programa que ha prometido "y que ha avalado" la ciudadanía en Guipúzcoa.

Por su parte, populares y socialistas temen que Bildu pueda "frenar" los proyectos estratégicos proyectados en Guipúzcoa, algo sobre lo que también mantienen sus reticencias los jeltzales. No obstante, el propio presidente del EBB, Iñigo Urkullu, precisaba que la coalición no podría aprobar ciertas iniciativas que fueran en contra de toda la oposición.

El territorio guipuzcoano se presenta "conflictivo" ya que populares y socialistas temen que el PNV deje gobernar a Bildu en la Diputación a cambio de la Alcaldía de San Sebastián. En el caso de la capital guipuzcoana, esto supondría un revés para el PSE-EE que ha aceptado la renuncia de su candidato, Odón Elorza, porque, según ha reconocido, el PP y los jeltzales lo veían como un "impedimento" para que los socialistas estuvieran al frente del Consistorio.