SEVILLA, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, ha pedido la "unidad" de todas las fuerzas políticas para conseguir la financiación de la economía española y andaluza, asegurando que el país tiene que recuperar el valor "como país" para lograr dicha financiación, en unos momentos "muy complicados" y en los que, según ha apuntado, la prima de riesgo se encuentra en 550 puntos y estamos "prácticamente al borde de la intervención". "Tenemos una base para conseguir ese punto de encuentro, pero no puede hacerse excluyendo a nadie", ha añadido.
Durante su intervención en la sesión de control al Ejecutivo en el Pleno del Parlamento andaluz, en la que ha sido interpelado por el portavoz del grupo parlamentario de IULV-CA, José Antonio Castro, --la primera vez que lo hace en la presente legislatura--, Griñán ha indicado que la austeridad por si sola "no basta" y que es necesario que el Banco Central Europeo emita eurobonos y que haya una política europea "común y compartida".
Griñán, que ha dicho compartir con el portavoz de IULV-CA su preocupación por la situación del déficit y su concepto, ha criticado que se hayan separado dos cuestiones que van unidas como son el déficit y el endeudamiento. En su opinión, hacer una política económica centrada en la corrección año a año del déficit es una política "equivocada" porque sólo genera "más paro, menos crecimiento y recesión".
En esta línea, el presidente de la Junta ha incidido en que la política del déficit no puede conseguir por si sola los objetivos "que nos tenemos que plantear", añadiendo que la política de austeridad "convertida en ley", solo está trayendo "más depresión y menos bienestar". "Recortando el gasto público conseguimos un menor crecimiento económico y terminar aumentando el divisor del déficit", ha señalado.
Tras afirmar que cree en el concepto de estabilidad presupuestaria y que su Gobierno cumplirá con los objetivos marcados al estar obligado por ley, el líder del Ejecutivo andaluz ha dicho que, no obstante, está en desacuerdo con varios puntos. Entre ellos, ha mencionado el déficit cero, que ha considerado "un fundamentalismo económico".
Griñán, que también ha dicho estar en desacuerdo con el plazo de consolidación fiscal, al considerar "imposible" que en 2013 se alcancen los objetivos marcados, ha mostrado, de igual modo, su discrepancia con la distribución del déficit entre el Estado y las comunidades autónomas, así como también en el reparto entre las distintas regiones, en función del Producto Interior Bruto (PIB).
CASTRO: "TEMEMOS QUE LOS PACTOS DE ESTADO NO VAN A SERVIR PARA MUCHO"
Sobre el pacto de Estado propuesto por Griñán, el portavoz del grupo parlamentario de IULV-CA ha dicho que su formación le va a acompañar "lealmente", pero que se teme que los pactos de Estado "no van a servir para mucho". "Decimos no a más pactos de Estado a las espaldas de la ciudadanía, pero sí con el pueblo", ha señalado el portavoz parlamentario de IULV-CA, quien ha defendido que hay que "empoderar" al pueblo andaluz para la defensa de nuestros derechos.
Durante su intervención en la sesión plenaria, Castro ha considerado "impresentable" que el "agujero especulativo" de los bancos se resuelva con deuda pública. Y es que, según ha apuntado, ello llevará a que hayan nuevas exigencias en el cumplimiento del déficit y al hecho de que "estemos tutelados por los hombres de negro, que no son los de la película".
José Antonio Castro, que ha mostrado su desacuerdo con una política "abocada exclusivamente a la reducción del déficit", ha indicado que hace falta una alternativa de izquierdas. "Europa no está al servicio de la ciudadanía, sino de los mercados", ha considerado el portavoz, quien ha instado a Griñán a que "el empeño" del Gobierno andaluz, "con sus limitaciones", sea hacer ver que existen otras alternativas, "que sean encabezadas por la ciudadanía".
En este contexto, ha abogado por un diálogo entre las comunidades autónomas, apuntado que el senador andaluz de Izquierda Unida, José Manuel Mariscal, defenderá en la Cámara Alta una enmienda de redistribución del "drástico recorte" realizado por el Gobierno de la Nación de 10.000 millones en sanidad y educación, "a través de unos criterios más justos que ahorrarían 600 millones a Andalucía".
