SAN SEBASTIÁN, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
El joven de Azpeitia (Guipúzcoa) acusado de matar a Amaia Azkue el 16 de marzo de 2011 ha sido condenado a diez años de internamiento y cinco de libertad vigilada por el Juzgado de Menores de San Sebastián, según la sentencia hecha pública este lunes.
Al acusado, que era menor de edad cuando se cometió el crimen, se le considera culpable de un delito de asesinato así como de otro robo con intimidación, sustracción de vehículo y contra la seguridad vial por conducir el coche de Azkue sin tener el carné.
El cuerpo de Azkue fue hallado sin vida el 16 de marzo del pasado año en las aguas del pantano Ibai-Eder de Azpeitia. El joven condenado se entregó el 17 de agosto, un día antes de cumplir la mayoría de edad, en la Fiscalía de Menores de la Audiencia Provincial de Guipúzcoa, donde confesó ser el autor del crimen, y posteriormente fue internado en el centro de menores de Zumárraga.
No obstante, seis meses después, volvió a prestar declaración en la que se cambió su confesión anterior y aseguró que no la había matado él, sino otra persona.
El ministerio fiscal y la acusación particular, ejercida por la familia de Azkue, solicitaron una pena de diez años de internamiento en régimen cerrado y cinco años de libertad vigilada. Por su parte, la defensa solicitó el sobreseimiento de la causa.
Azkue, residente en Getaria pero natural de Orio, aunque realizaba su vida en Zarautz, tenía 39 años, estaba casada y era madre de dos hijas. Según las investigaciones de la Ertzaintza, el crimen se cometió a primera hora de la tarde del 16 de marzo, cuando Amaia Azkue recogió al joven en su vehículo en Zarautz y accedió a trasladarle hasta Azpeitia.
