MADRID, 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, recibirá mañana en Madrid a su homólogo surcoreano, Ban Ki-moon, en medio de las advertencias de la comunidad internacional al régimen norcoreano de Pyongyang para que no efectúe el lanzamiento de un misil balístico de largo alcance.
Moratinos ofrecerá un almuerzo al jefe de la Diplomacia surcoreana con motivo de una visita que inicialmente se acordó para hacer un repaso al estado de las relaciones bilaterales entre España y Corea del Sur.
El ministro surcoreano de Defensa, Yoon Kwang-ung, afirmó hoy ante el Parlamento de Seúl que el posible lanzamiento de un misil de largo alcance por parte de Corea del Norte "no es inminente".
"A nuestro juicio, no es inminente el lanzamiento de ningún misil", afirmó el ministro en relación con los crecientes rumores sobre la intención de Pyongyang de efectuar desde su costa occidental una prueba balística de un misil 'Taepodong-2', con capacidad para llegar a Estados Unidos.
No obstante, según Yoon, en caso de que Corea del Norte dispare un misil hacia territorio surcoreano, las fuerzas conjuntas estadounidenses y surcoreanas estarían preparadas para interceptarlo inmediatamente.
Japón y Estados Unidos han advertido severamente a Corea del Norte de que no lance ningún misil de largo alcance y han enviado barcos y aviones a la zona para vigilar los movimientos de Pyongyang.
Corea del Norte hizo un lanzamiento similar en 1998, lo que generó una gran preocupación en Japón, cuyo Gobierno aceleró con Estados Unidos la puesta en marcha de un sistema de defensa antimisiles.
En 1999 Pyongyang impuso unilateralmente una moratoria en los lanzamientos de misiles de largo alcance cuando sus relaciones con Washington eran relativamente amistosas. No obstante, desde entonces ha efectuado numerosas pruebas de misiles de corto alcance, incluidas dos el pasado mes de marzo. Las dos Coreas están técnicamente en guerra desde la Guerra de Corea de 1950-53, que concluyó con un alto el fuego y no con un tratado de paz.
