La dirección nacional se volcará con Sánchez-Camacho, que contará con numerosos cargos del Gobierno y el partido durante la campaña
MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Partido Popular ha elegido Barcelona para celebrar su Intermunicipal con alcaldes y concejales del PP de toda España los días 26 y 27 de octubre, justo un mes antes de las elecciones catalanas del 25 de noviembre.
Una vez conocidos los resultados de las elecciones gallegas y vascas del 21 de octubre, la dirección nacional del PP se volcará en campaña con la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, que contará con la presencia de numerosos cargos del Gobierno y del partido antes de los comicios.
De hecho, fuentes del PP ha asegurado a Europa Press que el PP catalán espera que viajen a Cataluña el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría; el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón; la ministra de Fomento, Ana Pastor; el titular de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo; y el de Interior, Jorge Fernández.
En medio del debate soberanista emprendido por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, Sánchez-Camacho destacará en campaña que el PP apuesta por la unión y no por la división y reprochará al Gobierno catalán que esté generando inestabilidad política. Además hará hincapié en el mensaje de que no es cierto que España roba a Cataluña como proclaman continuamente los nacionalistas de esa comunidad, avanzan fuentes del partido.
LAS REFORMAS Y EL MUNICIPALISMO, A DEBATE
La Intermunicipal contará con la participación de la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y es muy probable que también esté presente el jefe del Ejecutivo, si bien eso dependerá de que tenga un hueco en su apretada agenda.
La Intermunicipal, que está organizando el vicesecretario de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, contará con varias mesas de debate que abordarán las reformas que está aprobando el Ejecutivo y aspectos relacionados con el municipalismo.
Precisamente, una de las principales reformas en las que trabaja el Gobierno es la de la Administración Local, que se quiere aprobar antes de que acabe este año. Con esa reforma se pretende una clarificación de las competencias municipales para evitar duplicidades (lo que supondrá un ahorro de al menos 3.500 millones de euros).
Además, la reforma pretende la supresión de 3.725 entidades locales menores y mancomunidades y la supresión de más de 21.000 concejales en las próximas elecciones municipales. También se limitarán las retribuciones de los alcaldes y miembros de las corporaciones locales.
