PSOE pide Esperanza Aguirre que comience a recortar gastos reduciendo un 25 por ciento de sus altos cargos

MADRID 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

El portavoz socialista en la comisión de Presupuestos y Hacienda, Adolfo Piñedo, reclamó hoy a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, que comience a disminuir gastos con una reducción de un 25 por ciento de los altos de la Comunidad de Madrid, lo que supondría un ahorro de 2,92 millones de euros en 2010.

En rueda de prensa en la Asamblea de Madrid, Piñedo avanzó las líneas generales de la PNL que defenderán esta tarde y que es sólo "un ejercicio simbólico" de la reducción en el gasto que tiene que llevar a cabo la Comunidad de Madrid.

Piñedo señaló que desde que Aguirre gobierna en la Comunidad de Madrid los altos cargos han pasado de 133 a 139, el número de personas eventuales que trabajan en gabinetes ha pasado de 46 a 68, y se ha pasado también de no contar con la figura del subdirector general a disponer de 187. Además, el número de coordinadores, jefes y directores de área ha pasado de 149 puestos a 333.

Tras decir que es la misma propuesta que presentó el PP en el Congreso de los Diputados, más la medida de suprimir el doble sueldo de los viceconsejeros que al mismo tiempo sean diputados, Piñedo afirmó que para la gestión de 1.000 millones de euros la administración del Estado utiliza 1,5 altos cargos, mientras que la Comunidad de Madrid destina 7,3.

De vuelta en el ámbito autonómico, el socialista apuntó con ironía que desde que gobernaba la comunidad el "despilfarrador" Alberto Ruiz-Gallardón, se han aumentado en 6 el número de altos cargos y se gasta un 37 por ciento más en esta materia a pesar de que la presidenta Aguirre ya ha hecho dos reducciones de su Ejecutivo.

"Parece evidente que hay dónde recortar", indicó Piñedo, que añadió que se trata de un paso hacia la reducción del gasto, que también contempla otros ámbitos como el cambio de modelo.

Así, explicó que antes de la crisis una parte de los ingresos de la Comunidad provenía de las tasas derivadas de la construcción, mientras que después el volumen de éstas será menor, lo que obligará al Ejecutivo a cambiar su presupuesto de ingresos.