Atutxa reconoce que no ha "pensado nunca" en dejar el País Vasco y dice que será "duro" mirar a Goikoetxea

SAN FERNANDO DE HENARES (MADRID), 29 (EUROPA PRESS TELEVISIÓN)

El concejal del PSE de Eibar (Guipúzcoa) Benjamín Atutxa reconoció esta mañana que se le va a hacer "duro" mirar "a la cara" al etarra Arkaitz Goikoetxea después de ver el vídeo en el que el terrorista confesaba que pretendía secuestrarle y ejecutarle y aseguró que "nunca" ha pensado en dejar su actividad política en el País Vasco.

En declaraciones a los medios minutos antes de declarar ante la Audiencia Nacional como testigo en la segunda sesión del juicio contra siete presuntos miembros y colaboradores del 'comando Vizcaya' de ETA, Atutxa reconoció que antes de observar las imágenes "no había percibido ningún seguimiento" sobre él, ni "ningún peligro", por lo que veía "como algo mucho más lejano" que pudiera ser víctima de un acto terrorista.

La cinta refleja cómo Goikoetxea condujo el 24 de julio de 2008 al juez Baltasar Garzón hasta el zulo de Pazuengos (La Rioja), donde el comando guardaba jeringuillas y tranquilizantes para secuestrar al concejal, mantenerlo sedado durante un par de días y finalmente acabar con su vida, según relata el fiscal.

Atutxa explicó que no había "podido dormir casi nada" durante esta noche tras ver el vídeo y se lamentó de que nunca haya "sabido responder" a la pregunta de por qué la banda decidió su ejecución. "Eso debería de responderlo la dirección de ETA que es la que lo decidió", remarcó.

Así, subrayó que no ha "pensado nunca" en dejar su actividad política en el País Vasco ya que, según argumentó, "hay una gran mayoría de vascos" que le apoyan y que "están en contra de la violencia". "En este momento hay esperanza de que venga un cambio y se puedan resolver las cosas".

"PROFUNDO AMANTE DE LA LIBERTAD"

Sobre la gran cantidad de datos personales que la banda terrorista había recabado sobre él durante el tiempo que le estuvieron siguiendo, Atutxa afirmó que los etarras estuvieron "analizando las rutinas" que llevaba a cabo en su día a día, pero tuvieron que abandonar "la acción" al comprobar que llevaba protección de escoltas y la actuación sería "un riesgo".

Aún después de confesar que es un "profundo amante de la libertad", el concejal del PSE de Eibar sostuvo que a pesar de vivir en momentos de tregua, "nunca" ha dejado de "andar con escoltas" y contó que mantiene una "buenísima relación" con el agente que le escoltaba cuando ETA planeaba, supuestamente, asesinarle.

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