El cardenal Fernando Sebastián afirma que un Gobierno que "invade" la conciencia religiosa de los ciudadanos se aleja de la "democracia" y se acerca al "totalitarismo"
MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
La exvicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega ha sugerido ante los obispos españoles la "equiparación de derechos entre hombres y mujeres" en la Iglesia porque, a su juicio, tienen "pendiente" la asignatura de "igualdad de género", mientras que el cardenal Fernando Sebastián ha pedido que el Gobierno no "invada" la conciencia religiosa.
Así se han pronunciado este miércoles 3 de octubre durante la inauguración del Congreso 'La Iglesia en la Sociedad Democrática', a la que han asistido autoridades políticas, como la ministra de Educación, Isabel Celaá, y eclesiásticas, como una representación de los obispos españoles, encabezados por el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Ricardo Blázquez, y el Nuncio apostólico del Papa en España, Renzo Fratini.
Durante casi dos horas, los ponentes han expresado sus visiones sobre las relaciones entre la Iglesia y el Estado y han abordado aquellos puntos en los que convergen y divergen.
En concreto, la exvicepresidenta del Gobierno ha insistido en que un Estado democrático de derecho debe ser "laico" y ha precisado que la libertad religiosa pertenece al "ámbito privado".
En todo caso, ha apostado por una nueva ley de libertad religiosa que "aborde el proceso de separación entre Iglesia y Estado" y se actualice ante los "nuevos tiempos".
Además, se ha referido a la objeción de conciencia para subrayar que "no es aceptable" la visión de considerarla como un "derecho humano que pretende incluir a todos los funcionarios públicos".
Asimismo, ha indicado que la Iglesia católica está llamada a "no salirse de las atribuciones que le son propias" porque "es al Estado al que le corresponde legislar" y, en este punto, ha recordado que "guste o no", en España hay "una creciente aconfesionalidad".
Fernández de la Vega también ha mostrado su preocupación por las "desigualdades" en el mundo y ha instado a la Iglesia a trabajar conjuntamente frente a la "xenofobia" y los "populismos" que surgen ante los "intensos flujos migratorios".
En cuanto a la "asignatura pendiente" de "la igualdad de género", Fernández de la Vega ha apuntado "sin acritud", que "históricamente" la Iglesia ha dejado en "herencia" ideas "misóginas" sobre la "inferioridad del sexo femenino". Si bien, se ha mostrado convencida de que en la actualidad, la Iglesia puede jugar "un importante papel de defensa de los derechos de la mujer".
Llegado el momento, estoy segura de que será así, que la Iglesia inicie el camino hacia la plena equiparación entre hombres y mujeres", ha planteado, refiriéndose al estudio que se inició en el Vaticano sobre el diaconado femenino. Además, considera que es "una demanda social" y que "no tendría dificultad para encontrar acomodo en el mensaje evangélico".
"LA IGLESIA NO ES UNA AMENAZA PARA LA DEMOCRACIA"
Por su parte, el cardenal arzobispo emérito de Pamplona y Tudela, Fernando Sebastián, ha defendido que la Iglesia no es "una amenaza" para la democracia sino "una aliada" para defender los derechos y libertades de los ciudadanos.
"Querer eliminar a la Iglesia, la presencia de lo sagrado, sería excluir a un tercio de la población y una fuerza espiritual que contribuye al saneamiento y enriquecimiento de las personas y de la sociedad entera", ha subrayado Sebastián.
"Además, ha defendido la libertad religiosa y ha avisado de que un Gobierno que "invade" la conciencia religiosa de los ciudadanos se aleja de la "democracia" y se acerca al "totalitarismo".
"El reconocimiento de la libertad religiosa impone al Estado un reconocimiento de sus límites. Cuando la autoridad civil pretende invadir la conciencia religiosa de sus ciudadanos deja de ser democrática y se acerca al dragón totalitario del Apocalipsis", ha advertido el cardenal.
Sebastián considera que no se puede decir que se hayan alcanzado en España "buenos niveles de cultura democrática". A su juicio, todavía quedan "temores, desconfianzas y rigideces de quienes quieren retener situaciones ya superadas".
El cardenal también ha repasado los acontecimientos de la historia de España en el siglo XX, como la II República, la Guerra Civil y los 40 años de dictadura franquista. En concreto, se ha detenido en los "efectos nocivos de la contienda civil que dividió a vencedores y vencidos" y que "aún es un obstáculo serio para la reconciliación".
Ambos ponentes han coincidido en la necesidad de mantener un "diálogo" entre Iglesia y Estado para "fortalecer" la democracia, y de trabajar conjuntamente cada uno desde su campo de actuación.
El director general de la Fundación Pabo VI, Jesús Avezuela, ha precisado que la finalidad del congreso es "reflexionar sobre la profunda transformación de la sociedad en la política, la cultura y la religión" y reivindicar el "protagonismo destacado" de la Iglesia en la transición española, brindando "respuestas" a los "cambios" y "retos" que se presentan desde "un clima de diálogo".
