Actualizado 26/03/2023 13:02

No, los superalimentos no tienen propiedades milagrosas

Semillas de chía
Semillas de chía - BRUNO SCRAMGNON

MADRID, 26 Mar. (Verificat / EUROPA PRESS) -

Varios programas que se han emitido en los últimos tiempos por Youtube destacan la composición nutricional de la espirulina, el kéfir, la chía, la quinoa... alimentos que habitualmente se comercializan como "superalimentos". El concepto ha estado también presente en varios medios digitales, donde abundan los titulares 'clickbait' que destacan las supuestas propiedades milagrosas de estos productos, teóricamente ricos en proteínas, vitaminas, minerales, antioxidantes o probióticos (de hecho, un estudio reciente encontró 136 alimentos clasificados de tal manera en medios digitales escritos en inglés). ¿Qué hay de cierto en esto? ¿Existen los superalimentos?

EL MENSAJE QUE ESTAMOS VERIFICANDO

Que los superalimentos disponen de una composición nutricional que les otorga propiedades milagrosas.

CONCLUSIÓN

Verificat recoge en su verificación al respecto que: "Los superalimentos no existen, al menos no con esta idea que llevan asociada de propiedades curativas, únicas e independientes del conjunto de la dieta", según ha sentenciado en declaraciones a la web del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Jara Pérez, investigadora del Instituto de Ciencia y Tecnología de Alimentos (ICTAN) y autora del libro Los superalimentos (CSIC, 2021).

JUSTIFICACIÓN

Usado por primera vez en la primera mitad del siglo XX y popularizado en los años 90, el término 'superalimento' no es un concepto científico. Tampoco está definido por la FDA, la entidad reguladora de alimentos americana, ni la EFSA, la europea.

La Academia Española de Nutrición y Dietética (AEND) califica el concepto de superalimento de "estrategia de marketing" y añade que la mayoría de alimentos que se venden como "súper-" vienen de zonas lejanas --por lo que tienen un punto exótico-- y son de reciente uso en Europa --lo que la normativa europea define como "nuevos alimentos".

Por su parte, la Agencia Española de Nutrición y Dietética (AEND) opina que la idea de superalimento es una forma "informal [...] para referirse a alimentos que puedan aportar vitaminas, minerales, proteínas, fibra y otros nutrientes o sustancias [...] susceptibles de contribuir al buen funcionamiento de las funciones fisiológicas del organismo". La institución recuerda que el uso de la palabra superalimento en el etiquetado de un producto y en su publicidad "no es una declaración nutricional ni de propiedades saludables autorizada", es decir, que no se corresponde a ninguna categoría de la normativa vigente (reglamentos 1924/2006 y 1169/2011).

Algunos de los productos que más se venden bajo el paraguas de "superalimento" son las bayas de goji (por su alto contenido en antioxidantes y fibra), la quinoa (como fuente de proteína vegetal y aminoácidos esenciales), las semillas de chía (ricas en ácidos grasos) o el té kombucha (que contiene probióticos). Sin embargo, la ausencia de una definición oficial hace que la decisión de considerar un determinado producto como un superalimento dependa del criterio de cada persona o institución.

NINGÚN ALIMENTO SUSTITUYE A UNA DIETA EQUILIBRADA

No existe evidencia de que de que los productos calificados como superalimentos tengan efectos beneficiosos para la salud. Dos revisiones sistemáticas (aquí y aquí) que evaluaron los beneficios de 'superalimentos' como las bayas de goji o la quinoa concluyeron con que la mayoría de estudios sobre los beneficios de estos alimentos no se han llevado a cabo en humanos, sino en animales de laboratorio o sobre tejido celular. Y cuando estas investigaciones se han llevado a cabo en humanos o bien se han empleado cantidades de nutrientes mucho más elevadas de los que aporta una dieta normal o bien se han estudiado los productos aislados, según añaden la AEND y el Consejo Europeo de Información Alimentaria (EUFIC): "Se ha demostrado que los nutrientes contenidos en estos alimentos [los que reciben la etiqueta de superalimentos] tienen diversas propiedades beneficiosas para la salud [...] pero existen dificultades a la hora de aplicar los resultados de los estudios en dietas reales", apunta el EUFIC.

Giuseppe Russolillo, presidente de la AEND, señala en una conversación telefónica con Verificat que aunque las dietas "puedan ser terapéuticas", un alimento "por sí mismo no es capaz de [...] provocar la recuperación de una enfermedad bajo ningún concepto".

La investigadora Jara Pérez y el EUFIC subrayan que uno puede encontrar en alimentos vegetales las proteínas, probióticos, etc. asociados a los superalimentos, así que las necesidades nutricionales diarias están aseguradas si uno consume "cantidades elevadas de frutas, verduras, legumbres, frutos secos y cereales integrales".

Pérez concluye en declaraciones a la web del CSIC que "debemos cuidar el perfil global de la dieta y, a partir de ahí, es una elección personal si incluir aquellos alimentos conocidos como superalimentos" ya que "la chía es igual de 'súper' que las lentejas o que una naranja".

FUENTES

- Verificat (I)

- CSIC (I) (II)

- Diet cults : the surprising fallacy at the core of nutrition fads and a guide to healthy eating for the rest of us (I)

- Eufic (I) (II)

- Aesan (I)

- BOE (I) (II) (III)

- Academia Española de Nutrición y Dietética (I) (II)

- Departamento de Agricultura de EEUU (I)

- Harvard (I) (II) (III)

- ScienceDirect (I)

- Biblioteca Nacional de Medicina de EEUU (I)

- Cancer Research UK (I)

- Efsa (I)

Esta verificación se publicó originalmente en Verificat. Si os llegan mensajes que os parecen dudosos, podéis reenviárnoslos al 666 908 353 y el equipo de Verificat lo verificará.

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