Los cereales de desayuno cumplen 40 años en España

Planta del valls de kellogs
PLANTA DEL VALLS/ KELLOGS
Actualizado: jueves, 20 julio 2017 12:43

   MADRID, 20 Jul. (CHANCE) -

   Los años 70 supusieron grandes cambios para los españoles y uno de ellos sin duda fue el acceso a alimentos que hasta ese momento solo se podían conseguir en otros países. Precisamente en esa década Kellogg creó la categoría de cereales de desayuno en España al iniciar su actividad en nuestro país en 1977.

   Imágenes tan reconocidas como el tigre de Frosties, la rana de Smacks o el mono de Choco Krispies ya forman parte de nuestros recuerdos de infancia y de nuestra historia. También las campañas divulgativas de Kellogg han contribuido a informar sobre la importancia del desayuno: "Empieza el día, con energía...".

   María Otero, nutricionista de Kellogg, considera que "en los últimos 40 años, los conocimientos en nutrición han avanzado mucho y la población española a día de hoy reconoce el desayuno como una de las comidas más importantes del día". Además afirma que "tanto para niños como para adultos, debe cubrir entre un 20 y un 25 por ciento de las necesidades diarias de energía y de nutrientes", insistiendo en que debe ser completo, variado y equilibrado y en él no pueden faltar los lácteos, los cereales y la fruta.

   Durante cuatro décadas el mercado de cereales de desayuno en España ha crecido y se ha diversificado gracias a la innovación; incorporando nuevos ingredientes, como diferentes granos y semillas, y formatos, como las granolas, que amplían la oferta para adaptarse a la evolución de los gustos de la población. También la comunicación de Kellogg con sus consumidores se ha ido adaptando pasando de un modelo más basado en la TV hacia canales digitales y más experienciales que permiten mayor interacción.

   Las iniciativas de responsabilidad social corporativa de Kellogg son también innovadoras, introduciendo por primera vez en nuestro país los desayunos solidarios en las escuelas. El programa 'Todos a Desayunar' fue puesto en marcha en España en 2011 con el objetivo de ofrecer cada mañana un desayuno completo en el colegio a niños de 3 a 12 años que por su situación socioeconómica acuden a clase sin desayunar. En este programa han participado el pasado curso escolar más de 1000 niños de un total de 15 colegios repartidos por nueve ciudades españolas.

   Además de la lucha contra el hambre, la sostenibilidad es otra prioridad para la compañía. En este sentido, su planta de producción en Valls (Tarragona), que lleva en funcionamiento desde 1980, utiliza arroz producido en España como materia prima para la elaboración de cereales de desayuno que se comercializan en más de 20 países. En 2012, Kellogg puso en marcha en España el programa 'Origins', con el objetivo de optimizar los recursos, mejorar la rentabilidad y reducir el impacto medioambiental de estos cultivos de arroz.

   Los campos de arroz del Delta del Ebro participantes en este programa han tenido un considerable incremento del rendimiento respetando más el medioambiente. Más del 20% de la superficie arrocera del Delta del Ebro aplica las Mejores Prácticas en el cultivo del arroz identificadas y puestas en marcha por el IRTA (Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria) gracias a esta iniciativa, que ayuda a los agricultores de la región del Delta del Ebro y de la zona arrocera de Valencia a compaginar sus intereses con los de su entorno.

   Además de la categoría de cereales de desayuno con la que llegó a España, Kellogg comercializa también en el país desde 1999 barritas de cereales para otros momentos del día, como las barritas de Special K. Y en el año 2012, con la adquisición de la marca Pringles, Kellogg amplía su portfolio al entrar en la categoría de Snacks Salados, un negocio que ha llegado a crecer con porcentajes de doble dígito durante los últimos años.

   Kellogg lleva más de un siglo ofreciendo alimentos de alta calidad compatibles con un estilo de vida sano, que nutren a las familias para que puedan crecer y prosperar en más de 180 países en todo el mundo.