Azúcar Moreno, la dura historia detrás de ‘las gitanas’

Azucar Moreno reciben a Bertín Osborne
TELECINCO
Actualizado: martes, 27 septiembre 2016 1:18

MADRID, 26 Sep. (CHANCE) -

Son sin duda las dos gitanas más famosas de nuestro país y parte del extranjero, pero pocos conocen la historia que se esconde detrás de las hermanas Salazar y por eso mismo han invitado a Bertín Osborne a su casa, para contar la boca abierta y mucho orgullo su vida, puestos que solo se vive una vez.

UNA INFANCIA MARCARDA POR LA POBREZA

Tanto Toñi como Encarna recuerdan con cariño sus humildes orígenes y recuerdan con Bertín como muy pequeñas se trasladaron de Badajoz a Madrid para cantar en las calles. La familia al completo, que en aquel momento eran nueve hermanos, se trasladaron al madrileño barrio de Vallecas donde construyeron una chabola sin habitaciones en la que los once dormían juntos en el sofá. Las azúcar moreno recuerdan esta época de su vida con mucho cariño y reconocen que eran más felices porque estaban todos juntos, pero también las cantantes sentían ser diferentes al resto de los niños y aunque les hubiera gustado estudiar no podían por ayudar en casa, algo que no convirtió a las hermanas en analfabetas ya que según relatan después de “hacerse las calles” se iban a la escuela donde una mujer les impartía clase a ellas solas y por las tardes porque las tenía cariño.

Ambas confiesa que fueron momento difíciles porque les hubiera gustado tener la posibilidad de estudiar y formarse, pero fueron felices con la vida que les toco vivir.

LA PRESENCIA DE LA MUERTE EN SUS VIDAS

Aunque las cantantes siempre han mostrado su mejor cara, su vida ha sido más difícil de lo que parece y la muerte ha estado muy presente en su historia. El primero en abandonar al clan Salazar fue Enrique, en aquel momento el vocalista de Los Chunguitos que coincidiendo con el despegue del grupo a los 24 años de edad los abandonó para siempre.  Tras encontrarse un bulto en el cuello fue al hospital, donde le dijeron que estaba sano, motivo por el que la familia hizo una fiesta por todo lo alto para luego llevarse la peor de las sorpresas al fallecer cuatro días después por un tumor de garganta.

Tras el fallecimiento de Enrique relata Antonia, su madre no volvió a ser la misma y se dejó ir en una profunda depresión hasta morir dos años después con 53 años, y continuando con las perdidas por dolor el patriarca de la familia los murió de pena dos años después. Sin duda unos golpes durísimos para las cantantes que no pudieron demostrar a sus progenitores todos sus logros.

Pero estas pérdidas no fueron las únicas, después las abandonaría por una enfermedad la mayor de los hermanos, mas tarde otro de los chicos por un infarto y por último Carlos, que estaba en un pozo del que no quería salir por mucho que le ayudasen y le llevo a perder la vida.

De los nueve niños que dormían juntos en la chabola ya solo quedan dos chicos, Los chunguitos, y tres chicas, Toñi y Encarna y otra hermana más.

Las cantantes se emocionar al hablar de estos baches de la vida que tanto las han marcado, pero aún así nunca optaron por tirar la toalla y se consideran unas privilegiadas.

LA ENFERMEDAD DE ENCARNA

El peor momento de Toñi Salazar después de tantas desgracias no fue otro que cuando su hermana Encarna le comunicó que le habían diagnosticado un cáncer de mama en 2007. La cantante sintió que perdía a su hermana y su mundo se desvaneció, pero tal y como anuncio en una rueda de prensa las Azúcar Moreno siguen haciendo bailar y disfrutar a todo el mundo. Tras un año de tratamiento a Encarna le dieron la noticia de que estaba sana y dieron carpetazo a un horrible episodio que les cambio la forma de vida.

LOS HOMBRES EN LA VIDA DE LAS SALAZAR

A pesar de ser mito erótico para los españoles desde que fueron a Eurovisión, ni Toñi ni Encarna han tenido suerte con los hombres, una cruz que parece que le pesa más a Toñi que a su hermana, y es que la cantante que no se ha cortado en tirar los tejos a Bertín en más de una ocasión, ha confesado las ganas que tiene de tener una nueva historia de amor.

Ambas se han separado de los hombres de su vida en más de una ocasión, incluso Toñi fue madre soltera, y al final han aprendido que lo mejor es estar una junto a la otra.