Manuel Bandera: "Es difícil ser más crítico que yo conmigo"

El Actor Manuel Bandera
CRISTINA GARCÍA/EP
Actualizado: viernes, 13 noviembre 2015 23:14

MADRID, 29 Nov. (Por Noelia Gala) -

   Manuel Bandera regresa a los escenarios para encarnar de nuevo a el famoso abogado Billy Flynn de 'Chicago'. Sin duda un espectáculo muy especial para él, que tuvo que abandonarlo cuando el musical se fue de gira. Ahora, 'Chicago' ha vuelto a Madrid, y el malagueño no lo ha dudado un instante, aunque le suponga compaginarlo con el rodaje de la serie 'Bandolera'.

   Asegura que llevar los dos proyectos a la vez va a ser duro, pero que sabrá llevarlo cuidándose y descansando lo que pueda, sobretodo como exigencia para que su voz esté en perfecto estado y pueda dar lo mejor de sí con los temas de 'Chicago'.

   Fuera de rodajes y escenarios, Manuel Bandera es un hombre sencillo. Desconecta del trabajo con cine, escuchando música o viendo televisión. Casado desde hace 23 años con Marisol, la mujer de su vida, también disfruta de un buen paseo a su lado, o viendo jugar al fútbol a su hijo Miguel, de 19 años, quien ha heredado de su padre la pasión por el deporte.

- Estrenaste el musical, luego te fuiste a hacer otras cosas, y ahora vuelves, ¿lo echabas de menos?

- No me fui yo, se fue el espectáculo, te juro que yo no me moví de Madrid. Fue lo que le dije a la productora, que yo no podía irme de gira, pero les esperaba, que si volvían a Madrid yo estaría encantado. Y efectivamente, ha pasado. Y yo estoy encantado de participar en 'Chicago', me parece un espectáculo maravilloso de interpretar.

- ¿Qué tiene 'Chicago' que no tengan otros musicales?

- Para empezar tiene una partitura maravillosa. Las canciones son impresionantes. Después destacaría la fuerza que tiene el espectáculo, sin grandes decorados. La fuerza está en la orquesta y en nosotros. Todo unido y engranado a la perfección.

- ¿No hay margen para la improvisación?

- No, así está la pobre Marta Valverde... (risas). Hoy me decía que a veces se tiene que morder la lengua. Porque claro, nosotros somos más de otro tipo de interpretación, y a ella le gusta improvisar, y aquí no, aquí estamos totalmente cuadraditos. Pero yo no echo en falta nada, el espectáculo es tan redondo... Me gusta muchísimo interpretarlo, por eso he repetido aún teniendo que compaginarlo con la serie.

- ¿Qué exige a nivel físico y vocal?

- A nivel físico nada, porque no baila. Sólo saber llevar el esmoquín, que eso ya te da el porte suficiente. Vocalmente sí, tengo que cantar tres temas no muy difíciles de cantar para un cantante, pero para los que no somos cantantes, nos cuesta más. A mi me cuesta muchísimo. Cantar en realidad es una disciplina muy difícil, muy complicada. Es muy sensible y muy técnica. Cantar es la disciplina más difícil que me he encontrado en la vida.

- ¿Te hace cuidarte de una manera especial?

- Totalmente. Hay que dormir bien, para que la voz esté bien.

- ¿Cómo vives este regreso? ¿a quién invitaste al estreno?

- Lo vivo con mucha ilusión, con muchas ganas y con mucha confianza en este espectáculo. Yo creo que vamos a volver a tener éxito. Invité a mis amigos, compañeros de trabajo, que en la serie somos un montón. Este era el segundo estreno, con lo cual hay amigos a los que no les he hecho pasar otra vez. Invité básicamente a mi familia y a mis compañeros de la serie.

- Entre familia y amigos, ¿tienes tus mejores críticos?

- Es difícil ser más crítico que yo conmigo. Pero siempre hay algún amigo caritativo y algún familiar que te dice lo que siente de verdad, pero es difícil. Yo llevo más de veinte años en esta profesión y he sido autodidacta siempre, no vengo de escuelas. He tomado clases por mi cuenta. Entonces más crítico y más duro que yo conmigo, es imposible. Estoy acostumbrado a auto- analizarme, sé casi al cien por cien lo que he hecho bien o mal, lo que estoy o no transmitiendo. Después me apoyo lógicamente en mi familia y en mis amigos, pero con el filtro que yo hago, es difícil. Pero siempre viene bien la visión de mi familia y de la gente que me quiere.

- ¿Cómo te organizas con serie y musical?

- Es difícil. No es cuestión de organización, sino de dormir poco básicamente. Una cosa es por la mañana y otra por la noche, con lo cual dormir poco. Iré sacando horas de sueño de donde pueda. Espero que sean caritativos conmigo en la serie. Pura organización y cuidándome.

- ¿Lo llevas bien?

- Va a ser duro, no lo puedo negar. Pero lo haré organizándome bien, descansando mucho y cuidándome.

- 'Las cosas del querer', 'El zorro', 'Amar en tiempos revueltos, 'Bandolera', 'Cabaret'... ¿Eres chico de época?

- He hecho mucha época... Debe ser que tengo cara de antiguo (risas). A mi me gusta mucho hacer época. Con 'Bandolera' es un delirio. Encima he tenido la imagen cambiada, que me había tirado veinte años con la misma imagen. Con Juan me lo han puesto todo: bigote, patillas... A mi me encanta hacer época porque ya te da algo. Vestirte y la imagen ya te está aportando algo sólo por cuestión de imagen.

- Llevas más de veinte años en esto, parece que has encadenado proyecto tras proyecto...

- Eso parece, pero no ha sido así. Ha habido momentos de parón. El último fue después de terminar las tres temporadas de 'Cabaret'. Estuve once meses parado, mucho, y de eso no hace nada. Justo antes de 'Amar en tiempos revueltos', que después me fue muy bien. A partir de ahí la cosa ha ido bastante bien. La vida de un actor es muy dura, porque además juegas con tu autoestima. Cuando no suena el teléfono tú empiezas a pensar miles de cosas y tu autoestima se resiente. No es lo mismo que otros trabajos, han llamado a otro en tu sitio. Es muy duro, más de lo que parece.

- Y en esos momentos, ¿no piensas en arrojar la toalla?

- Claro, miles de veces. Pienso: 'yo tenía que haber seguido estudiando Educación Física, ahora sería preparador físico del Málaga, y mira qué bien estaría'. Pero es así, tiene sus pros y sus contras. En esos momentos se pasa mal, y tienes que tirar de la familia. ¿Por qué todo el mundo cuando recoge un premio se lo dedica a la familia? Porque son los que te aguantan en esos momentos malos, que hay muchos.

- Si tu hijo decidiera dedicarse a esto, ¿qué le dirías?

- Él sabrá, allá él... (risas). No, él ha empezado igual que yo, estudiando Educación Física, que ahora se llama de otra forma. Así empecé yo, viniéndome a Madrid a estudiar INEF. Mi amigo Adolfo y mi amigo Jaime me dijeron que se venían a hacer una cosa que se llamaba INEF, y allí me presenté. Mi hijo ha empezado igual, con lo cual no sé dónde va a acabar. Pero en principio está bastante centrado en su deporte en sus cosas, así que no le veo yo. Aunque hizo sus pinitos, trabajó conmigo en 'La Bella y la Bestia', hizo de tacita. Pero porque no se daba cuenta de lo que estaba haciendo, yo creo que le engañamos (risas). Se lo pasó bien, pero nunca más. Se parece bastante a mi, es bastante tímido, pero ha empezado con el deporte, que me parece mucho más sano que esto, y ya veremos cómo acaba.

- Cuando no estás trabajando, ¿cómo desconectas?

- Con mi hijo desconecto bastante. Los fines de semana voy a verle jugar al fútbol, que juega profesionalmente. Lo veo jugar, que además, me gusta tanto el deporte... Desconecto viendo cine, televisión, escuchando música, salir a dar un paseo con mi mujer por el Rastro, La Latina, tapeamos... Cosas normales. Ahora leer menos, porque cada día me tengo que estudiar guiones.

- ¿Qué es lo que te lleva a aceptar dos proyectos a la vez que sabes que te van a suponer un esfuerzo extra? ¿el miedo a que el teléfono no suene o que te gusten los dos?

- Es que esta profesión es muy imprevisible. Yo esto lo tenía preparado para acabar la serie y empezar con 'Chicago'. Pero la serie tira para adelante, no está mal de audiencia, entonces me coinciden. Me gusta tanto 'Chicago' que aún sabiendo que lo hubiera tenido que compaginar, lo habría hecho. Pero siempre es mejor hacer una cosa y después esta, pero esta profesión es así.