HUELVA, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía, a través de la Agencia Andaluza de la Energía, ha concedido incentivos por un valor superior a tres millones de euros a través de la Orden de Desarrollo Energético Sostenible (2005-2014) para la puesta en marcha de 23 proyectos para la fabricación de biocarburantes, lo que ha propiciado una inversión inducida de más de 88 millones de euros.

Según ha informado la Junta en un comunicado, de estos proyectos, 21 se engloban dentro de la categoría de generación de energía térmica con biomasa, biogás y biocarburantes y dos a plantas para la elaboración de biocarburantes. Estos últimos proyectos han sido realizados por BioOils Huelva SL y Biosur Transformación SL, con una inversión de 34,5 y 53,5 millones de euros respectivamente y un incentivo de 1,6 millones de euros cada uno.

Así lo ha puesto de manifiesto este jueves la delegada provincial de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía en Huelva, Manuela de Paz, durante la inauguración de una jornada técnica sobre 'Claves para el fomento de los biocarburantes: la distribución y comercialización de biodiesel y etanol en Andalucía', a la que han asistido una treintena de representantes de asociaciones de gasolineras, transporte y autoescuelas; así como de la industria química de Huelva.

Asimismo, la titular provincia de Economía ha recordado que Huelva es la provincia andaluza donde es mayor el consumo de biocarburantes, que representa el 4,41 por ciento del total del combustible para automoción, por lo que supera así la media andaluza, situada en el 3,51 por ciento, según los datos correspondientes al año 2009 de la Agencia Andaluza de la Energía, entidad adscrita a la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía.

En términos absolutos el consumo de biocarburantes ascendió en la provincia a 17.062 toneladas equivalentes de petróleo (tep), el diez por ciento del total andaluz, que llegó en la comunidad a los 166.660.

En la provincia se contabilizan un total de 12 biogasolineras, por lo que Huelva se coloca en el segundo lugar del raking andaluz tras Sevilla, con 26. Las estaciones que comercializan biodiésel en la provincia están ubicadas en las localidades de Aljaraque (2), Almonte, Alosno, Beas, Bollullos Par del Condado, Huelva (2), La Nava y Moguer, Valverde del Camino y Zalamea la Real.

Durante la jornada de este jueves se han abordado distintos temas relacionados con el fomento de consumo de biocarburantes como las actuaciones de promoción y fomento de los biocarburantes de la administración andaluza, el control de calidad de los biocarburantes, la distribución de biocarburantes, los aspectos técnicos del uso de biocarburantes en automoción y los proyectos de fomento y uso de biocarburantes. La organización de las jornadas han contado con la colaboración de la Agencia Provincial de la Energía de la Diputación de Huelva.

VENTAJAS DE LOS BIOCARBURANTES

En cuanto a las ventajas del uso de los biocarburantes, comparado con el gasóleo A, el biodiesel produce un 30 por ciento menos de emisión de CO2 y un 40 por ciento menos de emisión de humos. Ello se debe a que el biodiesel contiene Éster Metílico, una sustancia procedente de aceites vegetales obtenidos de plantas oleaginosas como la colza, la soja o el girasol y de aceites y grasas recicladas de hostelería y mataderos, entre otros.

Una de las mayores ventajas de este carburante es que permite reciclar el aceite de fritura, un residuo muy común y contaminante.

Por otro lado, el etanol es un biocarburante obtenido también a partir de biomasas con un elevado contenido en azúcar o almidón, trigo o cebada en el caso de España.

Además de las ventajas para el medio ambiente, el biodiesel mejora el rendimiento y alarga la vida del motor y de sus componentes en contacto con el combustible, debido a su alto poder lubricante: reduce la fricción, el desgaste y el ruido y mejora la combustión al optimizar la potencia de la mecánica y actualmente su precio es más económico que el de su competidor más contaminante, el gasóleo A.