Expertos de la Comisión Europea consideran "adecuados" los programas de vigilancia de los fosfoyesos

Actualizado: viernes, 18 septiembre 2009 16:20

HUELVA, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -

Una representación de la Dirección General de Transportes y Energía (DG-TREN) de la Comisión Europea (CE), compuesta por cuatro expertos en vigilancia radiológica ambiental, ha llevado a cabo una misión de verificación de la situación y actividades de vigilancia que se realiza en los terrenos del Centro de Recuperación de Inertes (CRI-9) así como, en las balsas de fosfoyesos en las Marismas de Huelva, que determina que los programas de vigilancia y los estudios realizados son "adecuados".

Según informó el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en una nota, tras la verificación, el equipo de la Unión Europea (UE) trasladó, como conclusión general y preliminar, que los estudios radiológicos y los programas de vigilancia establecidos son "adecuados y eficaces", de manera que los servicios de la Comisión publicarán un informe técnico detallado.

En lo que se refiere a las balsas de fosfoyesos, en la actualidad están revegetadas 400 hectáreas y, según un estudio elaborado por las Universidades de Huelva y Sevilla en 2007, los valores de radón (elemento químico) sobre estas zonas revegetadas son equiparables al fondo natural, por lo que el eventual impacto radiológico en la población, así como en los trabajadores del entorno de las balsas, causado por los apilamientos de fosfoyesos está "por debajo de los límites" fijados en la normativa vigente.

En relación con el CRI-9, se mantiene el programa de vigilancia requerido por resoluciones del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, analizándose sus resultados por el CSN, que lleva también a cabo inspecciones en las que se recogen muestras para su análisis por parte de laboratorios independientes.

Los resultados muestran que la contaminación permanece "limitada" a las proximidades de los frentes de inertizado, si bien se considera que se debe mantener el programa de vigilancia y las barreras para asegurar el confinamiento a largo plazo de la contaminación

RECORRIDO DE LA VISITA

Esta visita se enmarca dentro del marco del artículo 35 de Euratom se establece que cada estado miembro de la Unión Europea "debe crear las instalaciones necesarias a fin de controlar de modo permanente el índice de radiactividad de la atmósfera, de las aguas y del suelo, así como la observancia de las normas básicas. La Comisión tendrá derecho de acceso a estas instalaciones de control; podrá verificar su funcionamiento y eficacia".

De modo que en cumplimiento del citado artículo, la Comisión Europea notificó a las autoridades españolas su intención de realizar esta misión de verificación acordándose como fecha para su comienzo el día 15 de septiembre de 2009.

La misión se inició con una reunión entre los representantes de la DG-TREN y las distintas partes que tienen o han tenido responsabilidades en ambas zonas: Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, Ministerio de Medio Ambiente, Junta de Andalucía, Consejo de Seguridad Nuclear, EGMASA y Fertiberia, así como Enresa, Ciemat y las Universidades de Huelva y Sevilla.

Tras la reunión, la delegación se dirigió a los terrenos del CRI-9 donde se realizó una demostración de cómo se recogen las muestras en las zonas de control designadas, que posteriormente son enviadas para su análisis en el laboratorio, y de las mediciones de control radiométrico que se mantienen.

Los expertos también visitaron las balsas de fosfoyesos en las que se depositan los residuos de la actividad industrial de producción de ácido fosfórico, así como el área recuperada de la zona.

El programa de la misión de verificación se ha completado con la visita a los laboratorios pertenecientes a las Universidades de Huelva y de Sevilla, que han realizado estudios sobre el impacto radiológico de las balsas de fosfoyeso, así como a los laboratorios del Ciemat y Geocisa en Madrid, encargados de analizar las muestras procedentes del CRI-9.

La misión de verificación ha finalizado con una reunión de clausura que ha tenido lugar hoy en la sede del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en la que han avanzado conclusiones preliminares de su informe, que será remitido en los próximos meses.