Niebla (Huelva) recupera la noria medieval del Castillo de los Guzmanes

Niebla recupera la noria medieval del Castillo de los Guzmanes.
Niebla recupera la noria medieval del Castillo de los Guzmanes. - AYUNTAMIENTO DE NIEBLA
Publicado: jueves, 31 agosto 2023 18:52

NIEBLA (HUELVA), 31 Ago. (EUROPA PRESS) -

El municipio de Niebla ha recuperado la noria medieval del Castillo de los Guzmanes para su puesta en valor y disponer de otro recurso turístico. Tras un estudio sobre la apariencia original, se ha realizado una recreación de este enclave de la fortaleza iliplense.

Según ha indicado el Ayuntamiento de Niebla en una nota de prensa, la noria está ubicada junto a la barbacana, recientemente restaurada, y que está datada, según los expertos, en el bajomedievo. Para que esta reconstrucción sea fiel a la apariencia y técnica original, se han utilizado maderas nobles y otros materiales.

Asimismo, con anterioridad, se efectuó el correspondiente estudio que proporcionó detalles sobre la apariencia original de la noria y sobre el contexto en el castillo, tras el cual se ha procedido a la recreación de este enclave, a partir de ahora será otro "importante atractivo" para las visitas a la fortaleza, convertida en los últimos años "en uno de los monumentos más visitados de toda la provincia onubense".

Esta nueva actuación en la fortaleza medieval se ha ejecutado gracias a la Cooperación Territorial Europea Interreg, con un presupuesto total de 66.000 euros, dentro del proyecto 'Obras de Restitución del mecanismo de funcionamiento de la noria hidráulica junto a la torre de la barbacana del castillo de Niebla', cuyo organismo responsable ha sido la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía.

La noria fue construida a finales del siglo XV en el espacio de la liza meridional del castillo junto a la barrera interior. Según los estudios, su extraña ubicación podría responder a la reutilización de un pozo ya existente con anterioridad con una profundidad de 24 metros. Tiene una estructura labrada hasta los ocho metros.

El pozo es rectangular, de cuatro por dos metros, aunque su anchura se reduce a 94 centímetros mediante dos arcos de medio punto dispuestos en los lados mayores sobre el que se construiría el brocal. El brocal tiene un ensanchamiento en la esquina noreste para crear una plataforma de trabajo rectangular en la que aparece labrada la pileta que recogía el agua para conducirla a un depósito o alberca.

Para el Ayuntamiento iliplense, esta iniciativa refleja el "importante compromiso" con la preservación de la herencia cultural y el fomento de la ciudad milenaria para las generaciones presentes y futuras.