MÁLAGA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -
El área de Servicios Intermunicipales de la Diputación Provincial y el Servicio de Patología Forense del Instituto de Medicina Legal de Málaga celebran este martes y miércoles unas jornadas de formación complementaria para bomberos y policías, con el objetivo de mejorar el tratamiento de los escenarios y las pruebas en siniestros y grandes catástrofes para facilitar la investigación judicial posterior.
El objetivo del seminario, inaugurado por el diputado de Servicios Intermunicipales y presidente del Consorcio Provincial de Bomberos (CPB), Abdeslam Lucena, es dotar de conocimientos en medicina legal y forense a estos efectivos, que suelen ser los primeros en llegar a los lugares donde se han producido accidentes o tragedias. Allí deben extremar la precaución en la manipulación y tratamiento de evidencias para no perjudicar las pesquisas de los responsables judiciales y que las responsabilidades legales puedan ser convenientemente aplicadas.
Este programa reúne en la sala Málaga del Centro Cívico a unos 40 bomberos de toda la provincia y agentes de la Policía Nacional. Uno de sus fines principales es la confección de una ficha de actuaciones en caso de siniestros y catástrofes de diversas consideraciones, "de manera que esa información se pueda establecer en un protocolo que acerque a los profesionales de la seguridad, los de la Administración de Justicia y las aseguradoras en general", según Lucena.
Los participantes, además, recibirán formación específica para la resolución de problemas que plantea el Derecho, tanto en la aplicación práctica de las leyes como en su perfeccionamiento y evolución. Con estos conocimientos podrán priorizar acciones y compatibilizar su trabajo, tendente a la protección de la vida, con el mantenimiento de los escenarios en los que actúan.
Los bomberos y policías que toman parte en esta primera edición del programa ampliarán sus nociones sobre la identificación de cadáveres, la excarcelación --rescate de atrapados en accidentes de tráfico--, la información que deben facilitar a los patólogos forenses a su llegada, la mejor forma de tomar fotografías de los lugares siniestrados para que tengan uso forense y judicial, los balances e informes de daños físicos y humanos o la evaluación del estado de los cadáveres.
Así, profesionales del Instituto de Medicina Legal de Málaga aleccionan en estas jornadas a bomberos y policías en la recogida y custodia de datos en escenarios de accidentes u homicidios sin que se destruyan o desnaturalicen pruebas, ha precisado Lucena.
El jefe de Histopatología del Instituto de Medicina Legal, Valentín Ramos, ha iniciado las jornadas con una conferencia sobre organización de la actuación en grandes catástrofes y la identificación de cadáveres.
Ramos ha usado imágenes del accidente que el DC-10 de Spantax sufrió en Málaga en el año 1982, que se saldó con 51 fallecidos, y ha relatado cómo han evolucionado las técnicas de comprobación científica. Tras él, la forense del servicio de Patología Esperanza López, que también actúa como directora de las jornadas, ha profundizado sobre la identificación de cadáveres.
La forense Elisa Baranda, por su parte, ha disertado sobre la actuación de los bomberos en situaciones de interés médico-forenses como incendios, rescates en alta montaña, inmersiones o accesos a domicilios. Por su parte, el jefe del servicio de Patología, José Luis Palomo, ha analizado los problemas médico-legales relacionados con los accidentes de tráfico y la excarcelación de víctimas.
En la jornada de este miércoles, el forense Fernando Martín hablará sobre los protocolos de actuación relacionados con la información que se debe facilitar a los patólogos sobre los daños ocasionados en siniestros y el estado de las posibles víctimas. Por último, la forense Irene Palomo y el jefe del servicio de Laboratorio, Emilio de la Cruz, incidirán en los casos de incendios con quemados, así como en la carbonización de cuerpos o las intoxicaciones con monóxido de carbono.
