GRANADA, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un equipo integrado por una decena de expertos se encarga diariamente de la conservación del conjunto monumental de la Alhambra, que al tener gran parte de sus dependencias expuestas al aire libre y recibir una gran afluencia de público es más susceptible al deterioro que otros monumentos.
En la actualidad, hay varios talleres en la Alhambra para dar respuesta a sus necesidades de prevención, mantenimiento e intervención. Los más activos en este sentido son el taller de restauración de yesería, el taller de restauración de madera y el taller de jardinería, que trabaja en las huertas.
Para poder abarcar todo el recinto, los expertos realizan revisiones periódicas tanto por los espacios que están cerrados al público debido a su fragilidad --los cuales se inspeccionan una vez año-- como los que son objeto de la visita pública, que al ser más susceptibles al deterioro se controlan cada tres meses, según ha informado a Europa Press la jefa del departamento de Restauración del Patronato de la Alhambra y Generalife, Elena Correa.
Estas inspecciones permiten a los expertos saber cuáles son las actuaciones más urgentes y en qué lugares deben centrar su trabajo, que bien se desarrolla en los talleres cuando es posible desmontar la pieza en cuestión o 'in situ' si no es factible.
Ése ha sido el caso de la puerta de la Sala de los Abencerrajes, uno de los últimos trabajos del taller de maderas que se ha llevado a cabo en el lugar original para no afectar a otros elementos.
Para las labores de restauración, los expertos reproducen las técnicas que se usaban originalmente aunque se suelen usar materiales modernos porque los antiguos, o ya nos los fabrican o son de difícil acceso, según ha añadido la conservadora.
Una de las actuaciones más destacadas en los últimos años ha sido la restauración del patio de los Leones y de su fuente, aunque para este trabajo --que se ha prolongado durante varios años y ahora continúa con la colocación del pavimento-- se ha optado por contratar a una empresa externa, a fin de que el personal de los talleres pudiera seguir centrándose en el trabajo diario de conservación del recinto nazarí.
