SEVILLA, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
Las ejecuciones hipotecarias presentadas ante los juzgados andaluces descendieron un 30,3 por ciento en 2016, hasta las 12.106, la cifra más baja desde 2009, según el informe 'Efectos de la crisis económica en los órganos judiciales', presentado este viernes por la Sección de Estadística del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Andalucía es así una de las comunidades autónomas en las que más se reducen las ejecuciones hipotecarias, que en el conjunto del país cayeron un 29 por ciento en 2016, hasta las 48.410, la cifra más baja de las registradas desde 2008.
La Rioja y el País Vasco fueron las únicas comunidades autónomas en las que no se registró una bajada de las ejecuciones hipotecarias en 2016, con aumentos del 9 por ciento y del 5,6 por ciento, respectivamente.
Los descensos fueron especialmente significativos en la Comunidad Valenciana (39,6 por ciento), en Galicia (39,2 por ciento) y Navarra (38,8 por ciento) y superiores al 30 por ciento, además de en Andalucía, en Islas Baleares, Canarias, Cantabria, Castilla y León y Madrid.
Por su parte, el número de lanzamientos practicados el año pasado en Andalucía fue de 9.998, un 6,5 por ciento manos que en el año anterior, un descenso similar al registrado a nivel nacional, que fue del 6,4 por ciento, hasta los 63.037, frente a los 67.359 de 2015.
Según consta en el informe del CGPJ, del total de lanzamientos, 4.364 fueron consecuencia de procedimientos derivados de la Ley de Arrendamientos Urbanos; otros 5.193 derivaron de ejecuciones hipotecarias y los restantes obedecieron a otras causas. En Andalucía los lanzamientos por impago de alquileres bajaron el año pasado un 2,3 por ciento; mientras que los derivados de ejecuciones hipotecarias se redujeron un 9 por ciento.
En el conjunto del país, más de la mitad de esos lanzamientos (34.193) derivaron de la Ley de Arrendamientos Urbanos; mientras que otros 26.397 procedían de ejecuciones hipotecarias y los 2.447 restantes, a otras causas. A nivel nacional el descenso de los lanzamientos por impago de alquileres fue del 4,2 por ciento, mientras que los derivados de ejecuciones hipotecarias bajaron un 9,7 por ciento.
