SEVILLA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Hacienda del Grupo Socialista en el Parlamento andaluz, Antonio Ramírez Arellano, ha criticado este domingo el "recorte" de 135 millones de euros que la Junta de Andalucía "va a aplicar a la financiación básica" de las universidades andaluzas, y ha avisado de que "va a tener efectos muy significativos sobre los distintos colectivos universitarios, para los alumnos, sus familias, los profesores, para todas las instituciones universitarias en su conjunto".
En rueda de prensa de carácter telemático, el portavoz socialista ha lamentado que el ámbito universitario, "en lugar de encontrar respuestas a sus preguntas en estos momentos tan delicados y llenos de incertidumbres, encuentra recortes en este importante servicio público".
Arellano ha lamentado que el Gobierno andaluz de PP-A y Ciudadanos (Cs) no responde a cuestiones como "el modo en el que se llevará a cabo la docencia en los próximos meses, cómo serán los exámenes de septiembre, cuál será la oferta de plazas, el precio de la matrículas o si se mantendrá la bonificación de las mismas". "Estamos hablando de cuestiones que afectan directamente a casi 300.000 andaluces", según ha advertido.
El diputado socialista ha criticado que la Junta de Andalucía, "en vez de ayudar a este sector, les comunica a los rectores este recorte de un 10% de su financiación básica, que afecta directamente al pago de salarios o bonificación de matrículas y que aboca a las universidades a una difícil situación económica que conducirá a un déficit".
"Es difícil entender este recorte cuando nadie lo ha pedido, ni el Gobierno de España ni Europa", ha manifestado el portavoz socialista, quien ha subrayado que "lo que la Junta plantea es hacer un recorte y que lo cubran las propias universidades con sus ahorros, y las sitúa en una situación de asfixia".
Según ha resumido, "el Gobierno andaluz salda la deuda con las universidades, que los rectores no han pedido, y luego recuperan ese dinero que sólo pueden invertir en infraestructuras". "Habría sido más sencillo aplazar el pago de la deuda al año 2021 y dejar este año como está", ha sostenido Ramírez de Arellano.
