UGT y CCOO piden más medios en Jaén contra la siniestralidad laboral y las contrataciones irregulares en los tajos

JAÉN 18 Dic. (EUROPA PRESS) -

Los sindicatos UGT y CCOO se han concentrado a las puertas de la Subdelegación del Gobierno en Jaén a raíz del trabajador inmigrante fallecido en un tajo y abandonado sin vida en el centro de salud de Pozo Alcón. Lo han hecho para denunciar la situación y exigir más medios de la Inspección de Trabajo a la hora de luchar contra la siniestralidad laboral y las contrataciones irregulares durante la campaña de aceituna.

Por parte de UGT, Capilla Vega ha vuelto a pedir que se cumpla la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y que se sancionen a las empresas para evitar más muertes en el trabajo. En este sentido, ha vuelto a abogar por la derogación de las reformas laborales ante el convencimiento de que han servido para generar "temporalidad y precariedad".

"Hoy por hoy todo vale y los empresarios se están aprovechando", ha dicho Vega, al tiempo que ha insistido en la necesidad de dotar de más medios a la Inspección de Trabajo, sobre todo ahora, en campaña de aceituna donde la provincia está llena de tajos de olivar.

Por parte de CCOO, el secretario de salud laboral y condiciones de trabajo de CCOO, Miguel Ángel Salaza, ha mostrado el sentimiento de "indignación y consternación" ante el último fallecimiento en el tajo, sobre todo por las circunstancias que lo rodean. "Abandonado en el centro de salud con menos aprecio que una piedra en el campo", ha dicho Salazar, que ha recordado que son ya once las víctimas mortales en accidentes laborales en la provincia en el último año.

"Si hay focos de inmigración que está siendo contratada de forma irregular lo que se está demostrando es que no se está haciendo investigación", ha señalado el responsable de CCOO, que también ha insistido en la necesidad que la Administración dote de más medios a la Inspección de Trabajo, máxime ahora en campaña de aceituna donde "hay que reforzala vigilancia".

Tanto UGT como CCOO han criticado y lamentado lo "inhumano" de lo ocurrido con este trabajador inmigrante que tras sufrir un infarto en el tajo fue abandonado en el centro de salud de Pozo Alcón por el propio dueño de la finca, un vecino de Hinojares (Jaén), que lo había contratado verbalmente ya que el fallecido no tenía la documentación en regla.