SEVILLA, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El eurodiputado de IU Willy Meyer ha defendido este miércoles en Bruselas (Bélgica), la posición del comité de empresa del mercado central de abastos de Sevilla, Mercasevilla, en el debate de la iniciativa elevada a la Comisión de Peticiones del Parlamento comunitario por el gremio de mayoristas de pescado. Mientras los empresarios reclaman la suspensión de los servicios prestados por la lonja hispalense, Meyer advierte de que "la trazabilidad necesita intervención pública", abogando además por "conciliar los intereses del consumidor con los del productor".
Estos servicios, en concreto, se elevan al 2,025 por ciento en concepto de facturación y cobro del total de ventas y al 1,57 por ciento en el caso del servicio de transporte, manipulación y colocación del género, aspecto popularmente conocido como "arrastre". Ambos gravámenes, según los mayoristas de pescado, fueron declarados contrarios a las leyes de competencia por el Tribunal de Defensa de la Competencia a través de una resolución incluso ratificada por la Audiencia Nacional (AN).
Según el gremio de mayoristas de pescado, la sociedad mixta Mercasevilla, y el Ayuntamiento como accionista mayoritario, "violan" cuatro normas recogidas en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea a cuenta del cobro de estos servicios impuestos por el mercado central de abastos. Estas cuatro normas son el principio de libertad de empresa, "totalmente cercenado" en este caso, y los principios de igualdad, no discriminación y de protección de los consumidores, pues el "abusivo" cobro de estos conceptos "intervencionistas" en el comercio de pescado, "repercute finalmente sobre el consumidor".
Willy Meyer, según informa el Parlamento Europeo en un comunicado, se ha manifestado "totalmente de acuerdo con la defensa del comité de empresa de Mercasevilla". En opinión del eurodiputado de IU, dada "la dura situación" que la "agresión" de la crisis de la bacteria 'E.coli' ha significado para el mercado de los productos de Andalucía, "la trazabilidad necesita intervención pública". "Al no ser así, hemos tenido problemas muy serios", ha lamentado. Según Meyer, "la vigilancia del control público, junto a la transparencia fiscal, ayuda a la garantía de los propios productores y del consumidor".
Meyer considera, además, que "las propias alegaciones de los peticionarios se contradicen, porque el mercado de pescado en Sevilla es mucho más competitivo que en otros lugares". "De no existir este servicio público garantizando el libre mercado, muchas empresas habrían desaparecido, produciéndose un monopolio", concluyendo que "hay que intentar conciliar los intereses del consumidor con los del productor".
