SEVILLA, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del PP-A en el Parlamento, Carmen Crespo, ha asegurado este martes que las irregularidades en la Consejería de Empleo no son "cosa del pasado", sino "una herencia envenenada" que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, "no ha sabido o no ha querido atajar".
Así se ha pronunciado en rueda de prensa, en relación a las imputaciones, por un presunto delito de prevaricación, del director gerente del Servicio Andaluz de Empleo (SAE), Julio Samuel Coca Blanes, y el exdirector del SAE entre junio de 2012 y julio de 2015 y actual director general de la agencia IDEA, Antonio González Marín.
Crespo, que ha explicado que dichas imputaciones provienen del incumplimiento de las resoluciones judiciales en relación a la no readmisión de los trabajadores en los supuestos en los que se ha declarado nulo su despido, ha reclamado el cese de ambos cargos públicos y ha responsabilizado de esta situación a Susana Díaz.
La dirigente 'popular' ha asegurado que en la Consejería de Empleo están más preocupados por los asuntos judiciales que por crear empleo y formar a los desempleados andaluces y ha vuelto a insistir en la necesidad de llevar a cabo una auditoría en este departamento.
"Una iniciativa que sí ha apoyado Ciudadanos en la Comunidad de Madrid", ha apuntado Crespo, quien también ha criticado durante su comparecencia que el Gobierno andaluz se gaste el dinero en la "administración paralela" y perjudique a los trabajadores de la Junta.
