ZARAGOZA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
La entrada de animales al Centro Municipal de Protección Animal (CMPA) coincide prácticamente con el número de mascotas que salen en adopción y en 2020 se han adoptado 225 perros, 118 gatos, una cabra y seis pequeños mamíferos.
Estos datos revelan la "gran concienciación social" de los ciudadanos, ha subrayado el consejero municipal de Participación Ciudadana del Ayuntamiento de Zaragoza, Javier Rodrigo. "Esto significa que se adoptan prácticamente en la misma proporción que entran", ha apostillado la jefa de la Oficina de Protección Animal, Alicia Serrano.
El CMPA ha recibido 290 perros y 127 gatos, además de un ave y una cabra, esto supone un 37 por ciento menos que el año anterior, debido en parte al parón de la actividad provocada por la pandemia y a una mayor concienciación de la ciudadanía, cada vez más reacia a abandonar a sus mascotas.
Rodrigo ha asegurado que aunque haya un leve descenso de adopciones no está relacionado con el aumento de la tasa municipal que se aplica desde el 1 de enero, porque los adoptantes "asumen el gasto y no les importa". Se aplica en beneficio de los animales para "garantizar y tener más seguridad en las adopciones responsables" y ha emplazado hasta mitad del año para ver una comparativa sobre años anteriores.
Rodrigo y Serrano han ofrecido una rueda de prensa con motivo del primer aniversario del CMPA. El cambio de la antigua perrera de Peñaflor a las nuevas instalaciones en el barrio rural de La Cartuja, el pasado mes de abril, ha supuesto una mejora "importante" de las instalaciones, con una amplia zona de cuarentena y 21 cheniles para perros con bebederos automáticos.
VOLUNTARIOS EN MAYO
Además, antes del invierno, se han instalado cuatro cañones de calor en las dos naves para mantener la calefacción y un radiador en el umbráculo de gatos. También se ha equipado la sala de curas con material de cirugía y laboratorio, lo que ha permitido que el cien por cien de los animales del CMPA estén esterilizados. En la actualidad hay 20.813 registros de AND.
Por otro lado, el Consistorio zaragozano ha enviado en los últimos días 2.000 cartas para recordar a los propietarios de perros la obligación de registrar el AND de su mascota, como indica la ordenanza de protección animal con el objetivo de evitar el maltrato y el abandono.
Desde que se aprueba la normativa, se ha acelerado el registro de AND, ya que de los 4.212 perros genotipados en 2019 se ha pasado a 20.813 ejemplares.
Ambos han elogiado la respuesta de la ciudadanía y han animado a hacerlo los que todavía no han cumplido con esta obligación, ya que el número de perros con ADN registrado no alcanza a la mitad de la población canina, que según el Colegio de Veterinarios, se sitúa cerca de los 50.000 perros.
Rodrigo ha estimado que en mayo podrían volver los voluntarios al CMPA una vez que se apruebe la reforma definitiva del reglamento tras superar el periodo de alegaciones y superar la aprobación definitiva en comisión y pleno, que sería un par de meses.
REGLAMENTO
Sobre el recién aprobado reglamento del CMPA por el Gobierno de Zaragoza hace unos días la jefa de la unidad de Protección Animal, Alicia Serrano, ha explicado que esta regulación era "necesaria" y se aprovecha el confinamiento para elaborar "la parte más de oficina", que incluye la recogida de animales, que es la fase previa a la entrada y que se basa en la legislación de bienestar animal.
La idea es lograr la certificación AENOR de calidad del centro de que se cumplen ciertas normas y se pasan las auditorías porque no hay ningún centro en España que la tenga y si se enfoca el reglamento a esta norma se puede lograr.
Con este reglamento se busca mejorar el funcionamiento de este espacio que acoge a los animales perdidos o abandonados en la ciudad y los mantiene en las mejores condiciones higiénico-sanitarias hasta su adopción, ya que hasta ahora sólo estaba regulado por el artículo 16 de la Ordenanza Municipal sobre la Protección, Tenencia y Venta de Animales.
Estas instalaciones se estrenan el pasado 1 de abril, cuando termina el traslado de los animales de la antigua perrera de Peñaflor a La Cartuja, algo que se hizo en pleno confinamiento domiciliario, pues este servicio se mantuvo como esencial durante todo el estado de alarma.
Por esas fechas, el Ayuntamiento custodiaba cerca de 170 animales, frente a los 110 de la actualidad, un descenso que deja espacio para posibles emergencias, como la acogida de los 150 cachorros del criadero ilegal de Maella el pasado mes de junio, y que se debe en parte a las campañas de adopción impulsadas por la Oficina de Protección Animal. De hecho, actualmente las adopciones equiparan al número de perros que entran al CMPA.
Para avanzar en un mejor funcionamiento, el Ayuntamiento ha aprobado un nuevo reglamento. El nuevo texto, más extenso, ordenará el funcionamiento interno, así como la recepción de animales o las condiciones de alojamiento de los mismos. También fijará la forma, en la que se harán las salidas de las mascotas, que puede ser en acogida, en adopción o en casos excepcionales mediante eutanasia humanitaria, así como la participación del voluntariado.
ARTICULADO
El reglamento concibe el CMPA como un establecimiento público de gestión directa, se estructura en cuatro títulos, cincuenta y cuatro artículos, cinco disposiciones adicionales y una final.
El primero de ellos regula la entrada de animales por diferentes causas. Lo más frecuente es que lleguen animales abandonados o perdidos, pero también hay muchos casos en los que CMPA los custodia de forma temporal. Por ejemplo, en un decomiso policial, un desahucio, un síndrome de Diógenes o en una situación de maltrato animal.
Una vez en el CMPA, los animales son atendidos por los veterinarios que les hacen un estudio para detectar posibles enfermedades o parásitos; les ponen las vacunas necesarias e intentan localizar a los dueños.
El tratamiento veterinario continúa mientras los animales están en el centro, prestando especial atención al control de parásitos y enfermedades, a su alimentación y bienestar animal, para que cuando llegue la adopción sean entregados en las mejores condiciones sanitarias.
Todos estos aspectos quedan recogidos en el primer y segundo artículo, mientras que el tercero hace alusión a las normas de voluntariado de protección animal.
El Área de Participación del Ayuntamiento de Zaragoza quiere seguir contando con la colaboración de los voluntarios y, por ello, el reglamento recoge expresamente sus funciones, estableciendo una formación específica para el manejo de los animales.
Los voluntarios, tras superar este curso inicial, podrán participar en las actividades y en los programas de actuación con los animales. "Con su dedicación desinteresada, los voluntarios son de gran ayuda para los profesionales del CMPA y hacen una estupenda labor", ha comentado el consejero Javier Rodrigo.
La apuesta del Área de Participación por mejorar el bienestar animal se plasma también en los presupuestos municipales, que incluyen una partida de 600.000 euros para terminar las instalaciones, a lo que hay que sumar una de 80.000 euros, un 23 por ciento más que en 2020, para equipamiento, ha recordado.
