HUESCA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha mantenido una reunión de trabajo con los responsables del Servicio de Montaña y de la compañía de Jaca, en la provincia de Huesca, donde ha manifestado que no está prevista la supresión del Equipo de Rescate e Intervención en Montaña (EREIM) de Panticosa, en el Pirineo oscense.
Ha aclarado que se está llevando a cabo por parte del Servicio de Montaña un estudio de despliegue territorial para adaptarlo a las necesidades operativas actuales con la premisa de reforzar las plantillas sin aumentar el catálogo y potenciar el binomio Unidad de Montaña-Unidad Aérea, ha informado la Benemérita en una nota de prensa.
La directora general también ha mantenido un encuentro con el personal, al que ha felicitado por el trabajo realizado, especialmente durante este último año, a causa de la pandemia del coronavirus.
Por su parte, los mandos le han expuesto los cometidos que realizan, cuál ha sido su evolución en los últimos años, así como las perspectivas y planes de futuro.
Asimismo, la directora general ha podido presenciar en Coll de Ladrones, en el término municipal oscense de Canfranc, una demostración de procedimientos de rescates, en los que participaron agentes del Servicio de Montaña y del Servicio Aéreo.
Posteriormente, se ha desplazado hasta Centro de Adiestramientos Especiales de Montaña (CAEM), para conocer las instalaciones donde se imparte la formación necesaria para acceder a la especialidad y los cursos de perfeccionamiento necesarios para formar al personal en materias concretas. Actualmente, diez miembros del Cuerpo --un cabo y nueve guardias civiles-- se encuentran realizando el XXXIII Curso de Especialitas.
Antes de visitar el Servicio de Montaña, la directora general se ha desplazado a la Compañía de Jaca, compuesta por 124 efectivos distribuidos por ocho puestos ordinarios, en Canfranc Estación, Sallet de Gállego, Jaca, Hecho, Anso, Biescas, Sabiñánigo y Panticosa.
Además, cuenta con una Intervención de Armas y Explosivos, Equipo de Policía Judicial, Seprona, Agrupación de Tráfico y Sereim. María Gámez también ha mantenido un encuentro con el personal de todos los empleos y con dos guardias civiles que estuvieron hospitalizados por la COVID-19.
DATOS ESTADÍSTICOS
La Benemérita ha indicado que desde 1981, fecha en la que se cuenta con datos estadísticos, y hasta el 31 de diciembre de 2020, el Servicio de Montaña ha rescatado a 39.368 personas, de las que 3.043 han resultado fallecidas, 13.968 heridas y 22.357 ilesas, en un total de 23.070 rescates en montaña y lugares de difícil acceso.
En la actualidad, el Servicio de Montaña de la Guardia Civil está formado por un total de 255 especialistas distribuidos en 26 unidades repartidas por todo el territorio nacional, conocidas como GREIM, aunque en realidad se trata de Secciones, Grupos y Equipos de Montaña.
Respecto a su origen, la Guardia Civil ha detallado que en septiembre de 1967, se crean los Grupos de Esquiadores-Escaladores. Los nuevos especialistas formaban parte de la plantilla de un puesto, desempeñando el servicio en éste y esporádicamente realizaban servicio en la montaña.
El primer curso de Esquí-Escalada de la Guardia Civil tuvo lugar durante la primera mitad del año 1967 en el acuartelamiento de Coll de Ladrones, mientras otros miembros del Cuerpo se formaban en la Escuela Militar de Montaña de Jaca para configurar los cuadros de instructores de estos cursos.
En octubre de 1968, se agrupó a todos los especialistas en las localidades de Jaca y Boltaña y se crearon los dos primeros Grupos de Esquiadores-Escaladores. En noviembre, se formó el Grupo de Sierra Nevada (Granada), dedicándose en época estival a servicios propios del Cuerpo y esporádicamente de montaña.
Hasta la creación de estos grupos, los rescates, en los pocos accidentes que se daban en la montaña española, eran atendidos por los compañeros de la víctima o por los Grupos de Socorro en Montaña de la Federación Española de Montañismo (FEM), creados con voluntarios para tal fin.
Tras aquel embrión --que formaron los grupos de Jaca, Boltaña y Granada-- se crearon otros en Navarredonda de la Sierra (Gredos), Teruel (Sistema Ibérico), Navacerrada (Sierra de Guadarrama), Mieres y León (Cordillera Cantábrica), Viella y Puigcerdá (Pirineo catalán). Sin embargo, el sistema de dedicación exclusiva de los grupos del Pirineo oscense no se daba en todas las unidades.
UNIDADES DEDICADAS AL RESCATE
La Guardia Civil ha indicado que a principios de 1981 se elevó una propuesta para que todas las unidades de montaña funcionaran de la misma forma que en Aragón, con unidades plenamente dedicadas al rescate, desplegadas al pie de los macizos montañosos y con el apoyo del helicóptero cuando fuera necesario.
Después, se creó el Centro de Adiestramientos Especiales de Montaña (CAEM), lo que permitía y permite impartir la formación necesaria para acceder a la Especialidad y los cursos de perfeccionamiento necesarios para formar al personal especialista en materias concretas.
A este binomio helicóptero-especialista en montaña impuesto en la década de los 80, que supuso un importante avance en la realización de los rescates, se une ahora en Aragón la figura del sanitario, médico o enfermero, que garantiza una asistencia sanitaria en el lugar del accidente, configurando lo que se ha dado en denominar el 'modelo aragonés' de rescate en montaña, ha expuesto la Guardia Civil.
La gran afluencia de practicantes del barranquismo a partir de mediados de los años 80, obligó también a adoptar otras técnicas de rescate y nuevos materiales. Asimismo, a principios de la década de los 90, se comenzó el adiestramiento de los miembros del Servicio de Montaña en la práctica de la espeleología y el espeleosocorro, contándose en la actualidad con personal altamente especializado en esta materia.
En 2004, se diplomó la primera mujer como especialista en montaña, con el empleo de Teniente, que pasó a mandar el Área de montaña de Cangas de Onís.
COLABORACIÓN INTERNACIONAL
El Servicio de Montaña mantiene colaboración en el ámbito internacional con grupos de rescate de carácter policial de los principales países europeos con competencias en esta materia. Mención especial merece la colaboración con la Gendarmería Nacional Francesa con la que se mantiene un contacto fluido y una cooperación que llega a la realización de rescates en el Pirineo, a ambos lados de la frontera, cuando es solicitado por el otro país.
La Guardia Civil de Montaña se encuentra al nivel de los mejores grupos de rescate de Europa y su proyección internacional ha experimentado un salto cualitativo en abril de 2015 con la participación en la operación de rescate de dos montañeros fallecidos en el Atlas marroquí y apenas un mes después en la búsqueda de siete españoles desaparecidos en el Valle de Langtang, tras el terremoto de intensidad 7,8 que asoló Nepal.
