El Gobierno de Aragón se integrará en la futura fundación para conservar el Monasterio de las Canonesas de Zaragoza

ZARAGOZA, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha anunciado que su Ejecutivo se integrará en la fundación que quieren impulsar desde el Monasterio de la Resurrección de las Canonesas Regulares del Santo Sepulcro de Zaragoza para favorecer su conservación.

Lambán se ha pronunciado así con motivo de su visita al cenobio, ubicado en el casco urbano de la capital aragonesa, donde ha podido conocer los trabajos de restauración que se han llevado a cabo con presupuesto de la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón.

Ha estado acompañado por el consejero de Cultura, Felipe Faci, y la directora general de Patrimonio, Marisancho Menjón, así como por dos hermanas de la comunidad religiosa que vive en él, una de ellas, la canonesa y administradora de la comunidad, Ana María Martín.

Javier Lambán se ha comprometido a participar en la fundación que ayudará a conservar el "rico patrimonio" del monasterio, que suma 720 años de historia. Ha remarcado que Zaragoza "es una ciudad bimilenaria, una de las pocas ciudades españolas que ha sido siempre importante en la historia de la Península, en la historia de España, y eso significa que su patrimonio es rico desde cualquier punto de vista".

Ha precisado que en este monasterio es posible "reconstruir" la historia de la ciudad, un cenobio "que se construyó y se planificó al lado de la muralla romana, en el que hemos visto capitales islámicos y una sucesión de estilos", ha contado.

Por eso, ha manifestado, el Gobierno de Aragón "ha tratado de estar a la altura de las circunstancias", realizando en este lugar "algunas intervenciones que eran perentorias", para eliminar goteras e intervenir "en elementos que empezaban a tener problemas en su conservación" y el propósito es seguir actuando, también a través de esa fundación, en la que las canonesas les han invitado a participar, junto a otras instituciones, por la "responsabilidad" en conservar "este valioso patrimonio".

AGRADECIMIENTO

La administradora de esta comunidad religiosa, Ana María Martín, ha agradecido este pronunciamiento del presidente autonómico, así como las intervenciones que ha hecho el Ejecutivo aragonés "en áreas que nos preocupan mucho".

"Estamos en ese momento de cómo proteger este legado que hemos recibido de generaciones anteriores de mujeres, que lo han ido cuidando, manteniendo" y acrecentando, "gracias también a la sociedad" y, ahora, "nos gustaría, a través de las instituciones, compartir el cuidado" del mismo.

Incluye desde la muralla romana hasta una fachada del arquitecto Ricardo Magdalena, "huellas de la historia de la ciudad y de un grupo de mujeres que han compartido su vida aquí, como actualmente seguimos haciendo", ha expuesto la canonesa.

Asimismo, ha añadido que el monasterio "está vivo" y colabora con proyectos espirituales, sociales y culturales, entre los que ha mencionado su vinculación con la mesa por la hospitalidad con los inmigrantes, encuentros interreligiosos, y el acogimiento a la comunidad ucraniana ortodoxa, que celebra sus ceremonias en él, así como visitas guiadas a la cocina antigua y dos refectorios, "y este año iniciaremos a la muralla, que se está limpiado por parte del Ayuntamiento en este momento".

"Agradecemos que se vayan involucrando las instituciones y las entidades que quieran participar en esta protección del patrimonio, de la historia pasada, actual y de una historia que estamos entre todos construyendo", ha glosado.

NOS SOBREPASA

La administradora de esta comunidad religiosa ha reconocido: "El edificio y todo lo que se está generando dentro del monasterio nos sobrepasa" y por eso quieren crear esa fundación que dé cabida a las instituciones públicas y privadas que quieran participar y a todas las personas dispuestas a colaborar.

"No nos hemos puesto plazos, pero llevamos tres o cuatro años con este proyecto, que hemos ido trabajando internamente en la comunidad, con la pandemia del coronavirus se ha parado, pero que ahora lo retomamos con fuerza y esperamos que pueda llevarse a término en un plazo rápido", ha dicho.

Ha aclarado: "No es tanto lo que se pude aportar económicamente, sino el impulso y el sentirnos que se considera este edificio un valor en sí, que se puede apoyar y se puede caminar junto a nosotras".

MÁS DE 125.000 EUROS

Por su parte, la directora general de Patrimonio, Marisancho Menjón, ha explicado que en los últimos dos años el Ejecutivo ha destinado más de 125.000 euros a las obras de restauración de las cubiertas del antiguo dormitorio, los andadores derecho e izquierdo del monasterio, adecuación de la sacristía, y los trabajos de limpieza y restauración de dos lienzos del retablo de la Virgen de los Dolores, en la Iglesia de San Nicolás de Bari, cuatro tablas del retablo de la Virgen del Rosario de la misma iglesia, así como la redacción del proyecto de restauración del retablo de los Santos Julián y Lucía.

Las próximas actuaciones pasan por la recuperación del refectorio, cuya inversión rondará los 300.000 euros, y se estudian otras intervenciones en el retablo gótico de Jaume Serra, el más antiguo que se conserva en Aragón y que está completo, así como en el claustro alto.

El Monasterio de la Canonesas fue declarado Monumento Nacional en 1893 y Bien de Interés Cultural en 2002. Con posterioridad, se incluyó en la lista genérica de Monumentos Mudéjares de Aragón considerados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2001.

Está ubicado junto a la muralla romana y es una joya patrimonial en el centro de Zaragoza que resume en su interior la historia de la ciudad casi por completo, desde Roma hasta el XIX. En la parte oriental del casco urbano, se adosó a la cara interior de la muralla, de forma que en la actualidad conserva el mayor tramo existente en la ciudad, hacia la calle Asalto.

Guarda también elementos islámicos, como capiteles reaprovechados e inscripciones árabes en varios lugares del conjunto monástico. La orden de Canonesas del Santo Sepulcro lleva viviendo en esos muros, sin interrupción, desde que fue fundado a finales del siglo XIII, es decir, hace más de 700 años. Es el monasterio femenino habitado más antiguo de Aragón y el segundo en España.

CLAUSTRO

El claustro, gótico-mudéjar, es un espacio de gran singularidad en el que destaca la sala capitular, abierta mediante tres arcos góticos y que conserva su decoración geométrica en los muros, de honda personalidad islámica.

Conserva también, en el claustro alto, un retablo de Jaume Serra de enorme relevancia, es el único conservado entero de este renombrado autor gótico y para el que la Dirección General de Patrimonio Cultural ha redactado ya el proyecto de restauración, que se espera poder acometer en 2023.

El monasterio es un gran conjunto arquitectónico en el que se conserva el refectorio, la cocina renacentista, los grandes dormitorios y la iglesia, dedicada a San Nicolás, de época barroca y con interesantes retablos.

El muro exterior, que da a la calle Don Teobaldo, es fruto de una reforma realizada por Ricardo Magdalena a finales del siglo XIX. Da idea de su importancia el hecho de que fuera uno de los primeros Monumentos Nacionales reconocidos en Aragón, en el año 1893.

Una de las principales características del conjunto es que en los últimos años se ha convertido en espacio con vocación de presencia en el barrio en el que se enclava, en el Casco Histórico de Zaragoza, constituyendo un lugar de espiritualidad abierto a la participación de toda persona, con independencia de sus creencias.