ZARAGOZA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón implementará un plan de choque para reducir las listas de espera, incrementadas durante la pandemia de la COVID-19, con una batería de medidas, como concertar intervenciones quirúrgicas con el sector privado, ha anunciado este viernes la consejera, Sira Repollés, quien ha dejado claro que será en "un volumen similar" al de años anteriores.
La concertación se llevará a cabo "acordando los volúmenes y los tipos de pacientes", ha explicado Repollés en la sesión plenaria de las Cortes, en una interpelación con la diputada de Cs, Susana Gaspar, apuntando que en 2019 solo se ha externalizado el6 por ciento de las intervenciones y ha recalcado que Aragón gasta solo un 3,9 por ciento de su presupuesto sanitario en estas actuaciones por un 9,3 por ciento del sistema sanitario público nacional.
Otras medidas son aumentar el personal fijo; contratar a los especialistas que acaban de concluir su formación; optimizar los equipamientos y las infraestructuras; realizar un seguimiento continuado de los indicadores quirúrgicos; planificar la apertura de quirófanos en vacaciones y centralizar los procedimientos de escasa complejidad, como la cirugía de catarata y varices. Además, se retomará el convenio con la MAZ y se buscará la colaboración con el Hospital Militar de Zaragoza.
También, intercambiar pacientes de diferentes profesionales del mismos sector; aumentar la transparencia; continuar la publicación mensual y detallada de los datos; retomar la actividad de la Comisión de Listas de Espera del Consejo de Salud de Aragón; depurar las listas y homogeneizar los criterios de inclusión y priorizar las intervenciones de mayor efectividad.
Sanidad trabaja en el horizonte 2021-2022, con medidas a medio y largo plazo porque "no hay soluciones a corto plazo", y utilizará "todos los recursos humanos y materiales" a su alcance. "Nuestra expectativa es que la lista se reduzca de forma importante en 2020 y 2021" para alcanzar "cifras razonables", ha manifestado la consejera, quien ha aclarado que el Departamento ya está llevando a cabo algunas medidas, como la interconsulta virtual y el anillo radiológico.
Ha recordado que la reducción de las listas de espera es "un reto inherente a todos los sistemas de salud" y que el problema estriba no en la espera en sí, sino en el tiempo que los pacientes tardan en ser atendidos, lamentando que más de 29.000 personas están a la espera de una intervención, 9.500 desde hace más de 180 días en mayo frente a 7.176 en abril.
Entre las causas de los tiempos de demora, Sira Repollés ha mencionado la cantidad de recursos humanos, la metodología, la financiación, la coordinación de la Atención Primaria con la Especializada, la tecnología, las infraestructuras, el sistema de registro de la espera con identificación de morbilidad, la presión de la sanidad privada, la educación para la salud y el conocimiento ciudadano sobre los procesos de enfermedad, a lo que ahora se suma la pandemia, que "ha influido negativamente" ya que se suspendieron todas las consultas e intervenciones no urgentes. Uno de cada tres pacientes lleva más de seis meses esperando su intervención, cuando en junio de 2018 era el cinco por ciento.
RAPIDEZ
Susana Gaspar ha urgido a Repollés a eliminar las consecuencias de la parálisis derivadas de la pandemia "a la mayor brevedad", y ha alertado de que las listas de espera han aumentado un 280 por ciento, haciendo notar que no solo ha aumentado la espera para las intervenciones quirúrgicas, sino también las de consultas externas.
La parlamentaria de la formación naranja ha observado que "es un problema estructural" del sistema sanitario y ha apostado por "seguir fomentando la colaboración público-privada" porque "redunda en beneficio de la sanidad pública", pero también ha considerado necesario implementar medidas "estructurales".
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