Zaragoza Vivienda debe modernizar sus herramientas de gestión, según la Cámara de Cuentas

Viviendas en el Casco Antiguo de Zaragoza.

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ZARAGOZA 7 Ene. (EUROPA PRESS) -

La sociedad municipal Zaragoza Vivienda debe modernizar sus herramientas de gestión para ser más eficiente, según ha concluido un informe de fiscalización aprobado por la Cámara de Cuentas de Aragón sobre los ejercicios 2017 y 2018 de este ente municipal.

En él, se afirma que cumple satisfactoriamente con la principal misión de su objeto social, que es proporcionar una vivienda "digna" de alquiler a un "precio asequible" a personas con escasos recursos. También destaca el esfuerzo en captación de vivienda privada, si bien recomienda mayor coordinación entre administraciones para aumentar el parque disponible y dar una respuesta global a la necesidad de vivienda social.

Los auditores han identificado incumplimientos de gestión y de legalidad y han realizado once recomendaciones para mejorar la gestión, en general, y del programa de vivienda social en el municipio de Zaragoza, en particular.

Según ha detallado el documento, la actividad de la sociedad se divide en cuatro áreas: atención a situaciones de emergencia habitacional, ampliación del parque de vivienda social, fomento de la rehabilitación de vivienda privada y gestión del parque de vivienda social.

Para desarrollarlas, el Ayuntamiento de Zaragoza ha aportado a la sociedad municipal 13,4 millones de euros en 2017 y 15,2 en 2018 y los retrasos en la ejecución de inversiones presupuestadas han generado "abultados" saldos de tesorería por importes de 9,7 millones de euros en 2017 y 12,7 millones al año siguiente.

En 2018, la sociedad municipal ha gestionado 2.385 viviendas, la mayoría, situadas en los distritos Actur-Rey Fernando, Casco Histórico, Torrero y Oliver-Valdefierro, de las cuales, 596 cedidas por particulares o entidades financieras a través del programa de captación de vivienda vacía.

PRECIO DE ALQUILER

El informe de la Cámara de Cuenta ha señalado que en los años fiscalizados el precio medio del alquiler por una vivienda de 70 metros cuadrados ha sido de 260 euros al mes, un 30 por ciento inferior precio de mercado de viviendas de similares características y ubicación. Además, ninguna persona o familia ha pagado más del 30 por ciento de sus ingresos y ha habido una renta mínima de 85 euros al mes.

La diferencia entre el precio oficial y estos límites se ha cubierto mediante una subvención directa en el recibo del alquiler financiada por el Ayuntamiento de Zaragoza. En 2018, el importe total concedido ha ascendido a 1,7 millones de euros y el número de personas beneficiadas ha sido 2.687.

El perfil medio del arrendatario ha sido el de una mujer española, de entre 41 y 60 años, con estudios primarios, trabajadora, que vive sola y con unos ingresos inferiores a 10.000 euros al año. A 31 de diciembre de 2018, 3.261 personas estaban en lista de espera para acceder a una vivienda de alquiler social.

HERRAMIENTA DE CONTABILIDAD

El informe de la Cámara de Cuenta ha evidencia que Zaragoza Vivienda "carece de una herramienta de contabilidad analítica que permita asignar correctamente los costes directos e indirectos de las actividades que realiza". La sociedad tampoco dispone de indicadores para medir la evolución del coste de actividades concretas y comparar con otras entidades de similar objeto social, ha apreciado el ente fiscalizador.

La Cámara ha calculado este coste y así, por ejemplo, ha obtenido que el de una mediación de emergencia sería de 2.527 euros y el de la gestión del alquiler de una vivienda o local social ascendería a 3.635 euros.

Los auditores han llamado la atención sobre el uso de distintas bases de datos --viviendas, inquilinos, recibos de alquiler y ayudas-- que ofrecen información "útil" sobre el número de viviendas gestionadas, sus características, el perfil del inquilino, la lista de espera o la morosidad, "pero que no están conectadas entre sí, lo que obliga a realizar operaciones manualmente con el consiguiente riesgo de errores y pérdida de información".

102 TRABAJADORES

El informe de la Cámara de Cuenta ha constatado que a finales de 2018 Zaragoza Vivienda contaba con 102 trabajadores y ha advertido de la elevada tasa de temporalidad, del 49%. Además, ha evidenciado varios incumplimientos de legalidad en la gestión de personal.

Por otro lado, el análisis de los contratos ha revelado otros incumplimientos, como un gasto de 2,75 millones de euros "contraído sin haber seguido los procedimientos legales que regulan la contratación pública en los dos ejercicios revisados".

Además de las recomendaciones para corregir estos incumplimientos, la Cámara de Cuentas ha aconsejado a Zaragoza Vivienda "mayor coordinación y colaboración" con otras entidades públicas aragonesas para "optimizar recursos y unificar criterios" en la prestación de este servicio.

Igualmente, le ha animado a hacer un estudio sobre la necesidad real de vivienda social de alquiler, el establecimiento de un registro único de vivienda en Aragón y "reforzar" el programa de captación y movilización de vivienda vacía.