GIJÓN, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Gijón se sumó hoy al "dolor" de la familia de Andrea Rendueles de 20 años que falleció ayer como consecuencia de la explosión del material pirotécnico que estaba siendo transportado por un tractor coincidiendo con las fiestas de la localidad de Huerces.
El funeral por la joven se celebró a las 18 horas de hoy en la iglesia de San Martín de Huerces con la asistencia de familiares y amigos. En el siniestro resultaron heridas otras cinco personas, cuatro de las cuales continúan graves y otra con pronóstico reservado.
En un comunicado, el concejal gijonés de la zona rural, Manuel Faustino García, lamentó la muerte de la joven por entender que "nadie debería morir a los veinte años". "Ayer, la pólvora no tocó a fiesta, tocó a muerto y el cortejo festivo se tornó en fúnebre en medio del ruido, el miedo, la furia y la desesperación", reza el comunicado. Por ello, desde el Ayuntamiento de Gijón se unió con este comunicado "al dolor de la familia de Andrea Rendueles, el dolor de sus amigos, de las personas que prepararon con ella esa fiesta que era de la ilusión y acabó siendo de la desolación".
"Desde aquí vaya nuestra solidaridad, nuestro pesar, nuestro silencio dolorido ante una vida joven rota, ante la vida de esta 'neña' a la que aún quedaban muchas fiestas que vivir", comentó el edil quien destacó la colaboración de la familia de la joven y de la fallecida en la organización de las fiestas.
