GIJÓN, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional tuvo que intervenir en un domicilio de Gijón donde se encontraba un varón, de 47 años, en "muy estado agresivo" que tuvo que se ingresado en una unidad de psiquiatría. Los agentes fueron alertados de que en un domicilio del barrio del Natahoyo existían problemas con un joven que estaba en tratamiento psiquiátrico.
La llamada no alertaba de la especial agresividad del individuo ni tampoco de que estaba armado. Así al intentar entrar en el domicilio para calmar al sujeto, se encontraron con que no se trataba de un joven sino que era un varón de mediana edad que empuñaba un cuchillo.
Con este arma, los Policías fueron acometidos en varias ocasiones y a pesar de los intentos de los agentes para que depusiera su actitud cada vez se mostraba más agresivo y esgrimía el arma con el ánimo de alcanzarles, según informaron fuentes policiales a través de una nota de prensa.
Sin atender a los requerimientos de los agentes se cerró en su domicilio negándose a salir. Tras una intensa labor de mediación y de diálogo con esta persona sin que cediese en su propósito, los Policías, valorando que podía autolesionarse y que existía un riesgo real para su integridad física, intentaron entrar en el piso.
La puerta de entrada se encontraba bloqueada con varios muebles que tuvieron que ser apartados por los Agentes, que además fueron recibidos con mucha agresividad por esta persona, hasta que pudo ser controlado y tratado por los servicios sanitarios. Se había solicitado además la presencia de los Bomberos por si fueran necesarios sus servicios para acceder al domicilio.
Al hombre se le intervinieron un cuchillo tipo puñal y una herramienta múltiple consistente en martillo, hacha y palanqueta. El hombre fue ingresado en psiquiatría y puesto en libertad con cargos por el intento de agresión a los agentes tras prestar declaración judicial.
