La masa salarial que existe en el Principado de Asturias descendió casi 2.000 millones desde que comenzó la crisis
OVIEDO, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Acción Sindical de CCOO de Asturias, Gilberto García, ha insistido en la necesidad de que suban los salarios y que se supere la actual situación de precariedad y de falta de derechos que sufren los trabajadores. "Ya es tiempo de que suban los salarios", ha exigido el sindicalista.
García ha explicado que no es admisible que los políticos y las instituciones estén ofreciendo un discurso de que la economía ya se está recuperando, mientras que los salarios están en niveles muy bajos, situándose los trabajadores en un nivel de precariedad muy alto.
De hecho, aunque señala que esa fórmula de devaluar los salarios ha sido usada en toda Europa, ha insistido en que en España se ha agudizado. "Así cualquiera paga la crisis, del bolsillo de los trabajadores", ha lamentado, a preguntas de Europa Press.
El dirigente sindical ha dicho que los datos relativos a Asturias también reflejan esa precariedad en la que han instalado a los trabajadores asturianos. En 2008 la masa salarial que había en Asturias, es decir, la retribución de todos los asalariados que existían, ascendía a 12.059 millones de euros, tras una continua progresión. Sin embargo, en 2013, seis años después, la masa salarial en Asturias se ha desplomado a los 10.244 millones.
"Se ve claramente que en 2008, cuando empezó la crisis, se produjo una ruptura clarísima en los datos de masa salarial, que se debe a las reformas laborales, que propiciaron pérdidas de empleo, pero también mucha precariedad y bajas remuneraciones", ha manifestado.
El problema no existe sólo en Asturias. En otras partes de España pasa algo similar, según ha manifestado Gilberto García. Así, en 2008 el peso de los salarios en el producto interior bruto (PIB) era del 50,1 por ciento, frente a los beneficios empresariales, que eran del 41,7 por ciento.
Los datos oficiales indican que seis años después se ha reducido mucho esa diferencia en porcentajes, en detrimento de los salarios. Así, en 2013 el peso de los salarios bajó al 46,7 por ciento del PIB, mientras que los beneficios empresariales subieron al 43,7%, la tasa más elevado desde 1996, ha señalado el sindicalista.
"Tras la crisis hay una menor contribución salarial en el PIB, pero sin embargo crece el peso de los beneficios empresariales", ha explicado Gilberto García, que ha insistido en que buena parte de la crisis se ha pagado con el bolsillo de los trabajadores.
De ahí su exigencia de que suban de una vez los salarios. Ese es el motivo de que el acuerdo de negociación colectiva esté bloqueado. Desde CCOO no admitirán un acuerdo nacional que esté por debajo de un incremento del 1 por ciento. Eso sí, son conscientes que en determinados sectores y empresas debe ser aún mayor, por sus beneficios. En otros sectores, donde las cosas están peor, están dispuestos a ajustes. "Ya está bien que nos hablen del fin de la crisis y de que la economía está creciendo, mientras suben los beneficios y merman los salarios y la calidad del empleo", ha señalado.
