SANTANDER, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado a dos años y medio de prisión y a 45 euros de multa a un hombre que fue sorprendido por agentes de la Policía Nacional cuando estaba vendiendo dos bolas de heroína en la calle San Fernando de Santander.
La Sección Primera de la Audiencia le considera autor de un delito contra la salud pública de sustancias que causan grave daño, con la concurrencia de la circunstancia agravante de reincidencia, ya que constan dos condenas anteriores por hechos similares.
No obstante, el tribunal ha considerado que en este caso es aplicable el tipo delictivo para hechos que tienen escasa entidad y que se conocen como venta al menudeo.
El acusado alegó que el comprador era su amigo, le había prestado un dinero tiempo antes y que en ese momento aquel se lo estaba devolviendo, negando haberle vendido nada.
Sin embargo, la Audiencia ha valorado el testimonio "rotundo, contundente, firme y seguro" del agente de Policía acerca del pase presenciado y el hecho de que después, cuando identificaron al comprador, este manifestara que las bolas recibidas en su mano se las acaba de comprar al acusado.
Junto a ello, explica la sentencia que existen datos objetivos de carácter periférico, como la aprehensión de la droga al comprador, el precio de la misma en poder del vendedor y la "total inmediatez temporal con el acto de intercambio observado por la policía".
