TOLEDO, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Educación, Cultura y Deportes se ha puesto en contacto con los ayuntamientos de Castilla-La Mancha, como ha venido haciendo desde el curso pasado, para poner en marcha el funcionamiento de los comedores escolares en vacaciones. De este modo, estima que unos 800 alumnos de la región hagan uso de estas instalaciones en Navidad, cifra similar a las navidades de 2015, en las que 755 alumnos comieron en sus colegios.
Así lo ha puesto de manifiesto el consejero, Ángel Felpeto, en la rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno, donde ha explicado que el Gobierno de Castilla-La Mancha entiende la apertura de los comedores escolares en vacaciones como "un factor compensador de desigualdades y como un factor a tener en cuenta para mejorar la calidad del sistema educativo".
Tras recalcar que en las vacaciones de Navidad los comedores escolares estarán abiertos a la comunidad educativa en colaboración con los ayuntamientos que así lo deseen y con los que el Gobierno firmará un convenio, ha recordado que 1.833 alumnos hicieron uso de éstos el curso pasado en Navidad, Semana Santa y verano, lo que supuso un coste de 120.000 euros.
Además, el curso pasado, la Consejería firmó 28 convenios en Navidad, 31 en Semana Santa y 38 en verano. En las navidades de 2015 un total de 755 alumnos usaron los comedores y supuso un coste de 23.500 euros. Felpeto también ha recordado que en el presente curso escolar hay casi 10.000 alumnos usuarios de comedores escolares, 2.400 más que el curso anterior.
