TOLEDO, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
El director general de Familia de Castilla-La Mancha, Matías Segundo, aseveró hoy que el informe del Defensor del Pueblo nacional sobre la situación de los centros de menores, se realizó hace tres años y la situación actual de los centros no tiene nada que ver con la realidad en él reflejada.
Según informó la Junta en un comunicado, el departamento de menores de Castilla-La Mancha ha venido realizando informes periódicos de los centros, "porque lo prioritario para nosotros es la protección de los menores, es decir que el tratamiento y la rehabilitación de estos menores con problemas sea el mejor posible", según Segundo.
El informe al que se alude en los medios de comunicación, que elaboró la Consejería de Bienestar Social en marzo de 2006, es fruto de los seguimientos periódicos que se realizan en los centros y en el que se constata la situación que se aprecia en el momento de la visita de nuestros técnicos.
Este documento y otras actas de seguimiento se enviaron al Defensor del Pueblo como parte de la documentación que nos requiere, siendo de las pocas Comunidades que según la propia Institución los ha remitido.
"Todos los déficit, desperfectos o daños que se apreciaron en aquel momento fueron comunicados a la entidad gestora, la Fundación O'Belen para que acometiera las reparaciones y subsanara los daños y en una visita posterior, de fecha 8 de junio se comprueba que el centro está acometiendo una parte de las obras, en tanto que otras se encuentran ya realizadas".
Para estas obras y reparaciones y para el mantenimiento continuo de las instalaciones ante los deterioros que se producen en el uso diario, la Consejería de Bienestar Social ha concedido subvenciones a O'Belen por importe de más de 420.000 euros desde el año 2006.
Los centros a los que alude el informe son objeto de seguimientos periódicos por parte de los técnicos de referencia de los menores, para comprobar la evolución y el desarrollo de los chavales en el centro, además de mantener un contacto frecuente con ellos para conocer su día a día. En total se han realizado más de 40 visitas de inspección y seguimiento desde 2006.
En cuanto al informe del Defensor del Pueblo, la Consejería de Salud y Bienestar Social está interesada en su análisis pormenorizado porque hay aspectos que se pueden incluir para mejorar el funcionamiento de estos centros. "Si tuviéramos constancia de que se están haciendo mal las cosas, que se trata mal a los chavales, se cerrarían los centros", según han explicado tanto el consejero, Fernando Lamata, como el director general de Familia.
En relación con la garantía del servicio el consejero comentó que los técnicos de referencia de la Consejería, responsables del seguimiento de cada menor, tienen contacto permanente con el chico y con los responsables del centro, y si detectan alguna cuestión a corregir, lo plantean y se resuelve.
Asimismo, en Castilla-La Mancha y aunque no es obligatorio se pide autorización al juez y se da cuenta a la Fiscalía cuando se ingresa a un chaval en un centro de estas características, por tanto "Castilla-La Mancha cuenta con un sistema garantista en este sentido".
