TOLEDO, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 150 trabajadores de la empresa pública Tragsa en Castilla-La Mancha, integrada en el Grupo Tragsa, se han concentrado este jueves en Toledo asegurando que llegarán "hasta el final" para revertir el ERE que está realizando esta empresa pública a nivel nacional y que hasta el momento ha afectado a 63 trabajadores en la región y 610 a nivel nacional.
El presidente del Comité Autonómico de Empresa de Tragsa, Javier Osado, ha señalado en declaraciones a los medios que el grupo "está cambiando empleo estable por otro precario y eventual", destacando que durante el año 2015 hubo "1.000 contratos eventuales más de los que habitualmente hay".
Osado ha criticado que Tragsa "tiene 500 directivos, los mismos que en 2009, cuando la plantilla triplicaba la actual", asegurando que 200 de estos directivos "cobran más que el presidente del Gobierno".
"El grupo achaca pérdidas por sus inversiones en el extranjero pero los trabajadores no tenemos culpa de que se invierta y salga mal", ha comentado el presidente.
Además, Javier Osado ha recordado que el Grupo Tragsa "tiene vía libre, según el Tribunal Supremo, para ejecutar toda la cuantía del ERE", que, según ha detallado, afectaría a más de 1.300 trabajadores a nivel nacional y más de 150 en Castilla-La Mancha, región que cuenta con una plantilla de unos 350 empleados fijos y en torno a 250 eventuales.
El presidente del Comité de Empresa ha señalado que en esta semana se ha reunido con el vicepresidente del Gobierno castellano-manchego, José Luis Martínez Guijarro, una reunión de la que, ha afirmado, los representantes de los empleados salieron "bastante satisfechos". Sin embargo, ha pedido a la Junta que "mueva ficha porque Castilla-La Mancha es el cuarto ente que más trabajo da a Tragsa y tiene mucho que decir en todo este desaguisado".
Asimismo, ha recordado que, además de la asamblea de trabajadores que ha tenido lugar este jueves antes de la concentración, el día 26 de enero tendrá lugar una huelga de los trabajadores del grupo a nivel nacional con una concentración en la calle Génova, frente a la sede del PP, porque, ha finalizado, este partido "tiene gran culpa" de la situación ya que "desde que entró al Gobierno todo lo que ha traído son desmanes y lucha contra el obrero para quitar derechos obtenidos".
