MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) ha convocado el 2 de diciembre una gran marcha en Madrid para defender los derechos de las personas con discapacidad y sus familias ante el "grave riesgo" que corre su "continuidad y sostenibilidad" debido a los recortes que se llevan a cabo.
La marcha, con la que se espera congregar a miles de personas en la víspera del Día Internacional y Europeo de las Personas con Discapacidad, pretende ser un "aldabonazo" y una llamada de atención a la sociedad y los poderes públicos, según ha explicado el presidente de Cermi, Luis Cayo Pérez, durante el VIII Congreso de Cermis autonómicos que se desarrolla en Valladolid bajo el lema 'Repensar el activismo. El fffutro del movimiento social de la discapacidad'.
Así, bajo el lema 'SOS Discapacidad - Derechos, Inclusión y Bienestar a Salvo', el Cermi, acompañado por personas con discapacidad, familiares, voluntarios y profesionales, se concentrará para "unirse ante la inquietante situación que atraviesan, agravada por la crisis, las decisiones políticas de regresión de derechos y el debilitamiento del precario nivel de cohesión y protección social".
Con este acto pedirá "evitar el colapso de los sistemas y dispositivos de promoción y protección de las personas con discapacidad y sus familias" y la estrategia 'SOS Discapacidad', que iniciará su andadura con esta marcha, se mantendrá mientras perdure lo "más agudo de esta crisis", ha indicado el Comité.
Cayo Pérez ha incidido en que la situación general que se vive en España y en las diferentes comunidades es, el algunos casos, "próxima al colapso" por los "ajustes" y las políticas de restricción.
"Lleva a momentos de auténtica paralización", ha señalado el presidente de Cermi, quien ha asegurado que incluso se ha llegado al cierre de entidades que prestaban servicio a personas y familias, "conquistas" que consideraban que no tenían "vuelta atrás" y eran "irreversibles". Sin embargo, ha advertido de que en este momento pueden "malograrse" y gente que tenía "algún tipo de atención, recurso o apoyo que era imprescindible para su vida diaria y una mínima calidad y dignidad de vida, está a punto de perderlo".
Cayo Pérez ha asegurado que la marcha no tiene antecedentes en los últimos 20 años y espera reunir a "miles" de personas con discapacidad, familias, voluntarios, simpatizantes y público en general, para lanzar un "SOS" a la sociedad y a los poderes públicos.
"GRAVE RIESGO" DE PERDER DERECHOS
La razón, ha explicado, es que lo que se ha construido en los últimos 30 años, que es "poco y todavía no resuelto", "corre un grave riesgo de continuidad y sostenibilidad".
El presidente del Comité ha aseverado que en los "mejores momentos" siempre están "peor" que los demás y ahora que la sociedad "está mal", también son los primeros por los que comienzan los recortes. "No es justo que en la lotería de la vida siempre te toque el peor número, cuando hay bueno no llegas a lo bueno y cuando hay malo eres el primero que te toca lo malo", ha añadido.
En este contexto, Cayo ha asegurado que la respuesta de los poderes públicos es "desigual", pero también ha aclarado que "nadie en su sano juicio, aunque sólo fuera por lo políticamente correcto" va a decir que está en contra de la discapacidad, "pero una cosa es el discurso y otra la realidad de las decisiones que se toman".
En concreto, ha añadido que los recortes se sufren en "ámbitos críticos" como el empleo de las personas con discapacidad, que es una carencia "histórica" y que incluso en tiempos de crisis "no iba mal".
Así, ha detallado que los presupuestos para incentivos, ayudas al empresario o eliminar barreras en el trabajo, se reducen, e incluso gente que iría a trabajar para tener un salario por sí mismo "se resiente" y al final "sólo queda ir a políticas pasivas, tipos subsidios o prestaciones, que tampoco hay dinero para eso".
Además de este ámbito, ha asegurado que cualquier recorte general afecta más a los discapacitados, como por ejemplo en educación, ya que si se aumentan las ratio en las aulas, los discapacitados que necesitan mayor apoyo pierden calidad.
En cuanto a la posible reversibilidad de esta situación, Cayo Pérez ha incidido en que "si la sociedad va mal y a peor", las personas con algún tipo de discapacidad participarán de lo que le ocurra como parte de ella. Sin embargo, ha advertido de que no pueden tolerar que por tener una discapacidad participen "en mayor cuota" de lo que les corresponde a los demás, que es lo que les parece "intolerable".
