VALLADOLID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
Un centenar de personas se ha reunido hoy en Valladolid para advertir a la Junta de Castilla y León de que, aunque están "agotados" por el tercer cierre en diez meses de los gimnasios, no podrá apagar la "luz" que aporta el sector a la salud.
La concentración, sin consignas y con música de Mozart (Requiem Lacrimosa) ha llevado a los particantes a rodear vestidos de negro e iluminando la noche con las luces de sus teléfonos móviles el perímetro del CDO Covaresa de Valladolid para protestar contra el cierre de los gimnasios impuesto por la Junta de Castilla y León para hacer frente a la tercera ola del coronavirus.
Según han informado los organizadores a Europa Press, con esta iniciativa se persigue dar visibilidad a la situación "tan difícil" que vive el sector y para incidir en que el deporte "no es el problema, sino que es parte importante de la solución".
Los participantes en la concentración se han ubicado a partir de las 19.00 horas en el perímetro del CDO Covaresa, empezando por la entrada de la Carretera de Rueda, tanto en el acceso desde la calle como en las azoteas y han marcado con una hilera de luz todo el perímetro de la instalación.
Ha sido una concentración "breve y silenciosa", sin consignas de protesta, donde el único sonido que ha interrumpido el silencio ha sido la música.
"Estamos agostados, fundidos, desesperados, tristes por el tercer cierre en diez meses, pero no van a conseguir apagarnos la luz. Hemos sentido el respaldo de nuestros socios y contamos con el ánimo y apoyo de todas las familias a las que da sustento este sector. Insistimos, no somos el problema, formamos parte de la solución", ha indicado a Europa Press.
